pleno de la Academia de Ciencias de Cuba

El sábado 20 de abril de 2019 se celebró el pleno de la Academia de Ciencias de Cuba en el paraninfo del edificio que acoge a esa institución. La reunión estuvo presidida por el Vicepresidente de los Consejos de Estado y de Ministros Roberto Morales Ojeda, la Ministra del Ministerio de Ciencia, Tecnología y Medio Ambiente, Citma, Elba Rosa Pérez y el Presidente de la Academia de Ciencias de Cuba, Luis Velázquez.

El encuentro se inicia con la lectura de un documento de respaldo por parte de los académicos, a la declaración del gobierno revolucionario del 17 de abril que establecía la posición de Cuba en rechazo al bloqueo y a la activación del capítulo III de la ley Helms–Burton por parte del gobierno estadounidense.

A continuación, se recordó a tres académicos que ya no están: el Dr. Arabel Elías Iglesias, el Dr. Walfredo Torres de la Noval y el científico ruso, miembro correspondiente de la Academia de Ciencias de Cuba, Dr. Zhores Ivanovich Alforov, premio Nobel de física en el año 2000.

Después, el Presidente de la Academia de Ciencias de Cuba presentó las principales actividades realizadas en el año 2018. Una de las líneas de trabajo fue la actividad asesora y consultiva del estado cubano resumida en 12 tareas: proceso de discusión con el Citma sobre las políticas de Ciencia, Tecnología e Innovación y su instrumentación jurídica; actividades en respuesta a los supuestos ataques sónicos contra personal diplomático estadounidense; evaluación por parte de los académicos de los libros de texto a utilizar en el tercer perfeccionamiento de la educación en Cuba; elaboración de bases jurídicas y apertura de nuevas filiales en el país; creación de seis nuevas comisiones de trabajo, entre las que se encuentran: envejecimiento demográfico, asuntos económicos, seguridad alimentaria y nutricional, ahora suman 12.

Otras tareas realizadas fueron las siguientes: desde el mes de mayo de 2018 comenzaron a realizarse “las puertas abiertas de la ciencia” una forma de vincular a los científicos con la población y difundir el conocimiento científico; creación de la filial de la Academia en la provincia de Villa Clara y la publicación de tres números de la revista “Anales de la Academia de Ciencias de Cuba”. Se destacó en el periodo la incorporación de un grupo considerable de jóvenes a la Academia, de los que el 32% son mujeres.

A continuación la ministra del Citma interviene para hablar sobre las 13 políticas de ciencia ya aprobadas. En el proceso de aprobación de las mismas, la Academia hizo 20 recomendaciones de las cuales se aceptaron 18. Entre esas políticas se encuentran las del reordenamiento del sistema de la ciencia, la del sistema de propiedad intelectual, la de los parques científico – tecnológicos y su vínculo con las universidades, la de la gestión documental y archivos, la de los organismos genéticamente modificados, la del perfeccionamiento del sistema ambiental y la de la definición y creación de empresas de alta tecnología. Se exponen de manera resumida los elementos más importantes de la política de reordenamiento del sistema de la ciencia; en cuanto a la política de parques tecnológicos se menciona que se trabaja en la creación de los de Mayabeque, la Cujae, la UCI y la universidad de Matanzas, así como se dan los primeros pasos para la creación de los parques de la universidad Central de las Villas, la universidad de Holguín y la universidad de Oriente. Por último, se abordan algunos elementos de la política para el establecimiento de las empresas de alta tecnología.

Una vez culminada la presentación, emiten criterios 14 académicos y la Ministra responde algunas de las inquietudes planteadas: ya se está trabajando en las normativas jurídicas que respaldan las políticas aprobadas, se tiene conciencia de que hay que acortar los tiempos en que se aprueban los marcos legales, la Academia de Ciencias debe apoyar a las empresas, debe trabajarse intencionalmente la dimensión territorial, minimizar la improvisación, son fundamentales las alianzas entre instituciones, la preparación y la capacitación.

El Vicepresidente Roberto Morales Ojeda interviene y plantea las siguientes ideas: las posibilidades que tiene la Academia de Ciencias de Cuba para apoyar el desarrollo del país son incalculables, la Academia debe participar en la elaboración de las normativas jurídicas que apoyan las políticas aprobadas, apoyar el trabajo de implementación del marco legal que se desencadena a raíz de la aprobación de la Constitución; el pensamiento de Fidel es un arma muy valiosa para enfrentar la política actual de los Estados Unidos contra Cuba, hay que asumir el método científico en la vida cotidiana por parte de los directivos, debe desterrarse la improvisación, se debe ver la investigación como una inversión y no como un gasto, hay que generar más investigaciones que sean verdaderos aportes a la ciencia y a la calidad de vida del pueblo, deben formarse más doctores en ciencia, hay que elevar las competencias y el desempeño de los directivos, se debe aumentar la calidad de las publicaciones científicas y la jerarquización de las revistas de ese corte.

El vicepresidente ratifica la decisión de Díaz-Canel de que en las visitas gubernamentales a los territorios los ministros intercambien en las universidades, pero que eso también deben hacerlo las autoridades locales, es importante que las diferentes entidades se propongan convertirse en unidades docentes, lo que potencia el desarrollo local, todo lo planteado debe realizarse de manera holística y enlazarse con los ejes y sectores definidos en el plan de desarrollo hasta el año 2030. Todo lo anterior debe tener sus cronogramas lo que garantiza su control sistemático.

El siguiente punto que se abordó en el pleno fueron los premios de la Academia del 2018 y las estadísticas del año 1999 al 2018. Fue llamativa la forma de presentar la información, se hizo a través de grafos obtenidos por técnicas de minería de texto donde se correlacionan las entidades, las secciones de la Academia y los participantes en los premios; se muestran las propuestas de premios correlacionadas con la media histórica de los últimos 20 años, se presentan las tendencias ascendentes en la aceptación de trabajos como premios. En el 2018 el 49.7% de los nominados alcanzaron la condición de premio de la Academia de Ciencias de Cuba, se ilustra la relación de premios por las diferentes secciones de la Academia (destacan las secciones de ciencias biomédicas, ciencias naturales y ciencias sociales), se exponen las 21 entidades con más de 10 premios de la Academia por las diferentes secciones (se destacan la Universidad de La Habana, el Centro de Ingeniería Genética y Biotecnología, el Instituto de Medicina Tropical Pedro Kouri, la Universidad Tecnológica de La Habana, Cujae, y la Universidad Central de Las Villas), se revelan un grupo de indicadores de entidades que poseen más de 10 premios de la Academia (entre ellos: la Universidad de La Habana, el Centro de Ingeniería Genética y Biotecnología, el Instituto de Medicina Tropical Pedro Kouri), se exhibe la correlación de premios de la Academia contra doctores en ciencia y de premios de la Academia contra investigadores y profesores en las entidades que poseen más de 10 Premios. Por último, se presenta la distribución de premios por provincias donde los primeros lugares son ocupados por: La Habana, Mayabeque, Villa Clara, Ciego de Ávila y Holguín.

Después de este punto se proponen los Premios de la Academia de Ciencias de Cuba en el 2018, se otorgan siete en la sección de ciencias agropecuarias, 25 en la sección de ciencias biomédicas, 14 en la sección de ciencias naturales y exactas, 26 en la sección de ciencias sociales humanísticas y ocho en la sección de ciencias técnicas.

Se procede a la elección de los nuevos miembros de honor de la Academia de Ciencias de Cuba entre los que se encontraban las Doctoras María Dolores Ortiz y Lesbia Cánovas y de dos miembros correspondientes.

Posteriormente se entrega la orden Carlos J. Finlay a tres personalidades de la ciencia cubana, entre ellas el Dr, Reinaldo González.

Para finalizar el pleno se hace la propuesta de crear una red de consejos científicos.

Las palabras finales estuvieron a cargo de Elba Rosa Pérez, Ministra de Ciencias, Tecnología y Media Ambiente, la que planteó que la comunidad científica cubana debe apoyar el esfuerzo del país en una coyuntura difícil.