Ernest Hemingway

Entre el 20 y el 23 de junio se dan cita en La Habana investigadores de la vida y obra de esta fascinante figura de las letras.

“Cuando se habla de un Coloquio Internacional Ernest Hemingway no podemos estar seguros de qué va a ser sorpresa, porque cada especialista, cada investigador, investiga a Hemingway en sus diferentes facetas y tiene su propia interpretación en cada uno de los aspectos de la vida del escritor. Por eso es que el coloquio lo que hace es permitir un intercambio entre los investigadores de la vida y obra de Hemingway a nivel internacional, se reúnen todos en este evento que se efectúa cada dos años y se convierte también en un intercambio de conocimientos.”

Así lo expresó, en exclusiva con CubaSí, Isbel Ferrero Garit, subdirectora del museo emplazado en lo que fuera la casa de Hemingway, en Finca Vigía, quien recuerda que, aunque este año el evento está dedicado al 93 Aniversario de la primera publicación de su obra Fiesta y los 90 años de Adiós a las armas, “como Hemingway es tan multifacético, se deja siempre una temática abierta sobre su vida y obra, es decir, los investigadores no se tienen que sentir atados al tema de esta edición, siempre se les da una temática abierta para que puedan presentar sus trabajos.”

En el diálogo participó también la Presidenta Ejecutiva del Coloquio y Directora del Museo, Grisell Fraga Leal, quien explico la importancia de la participación de investigadores extranjeros, especialmente los norteamericanos: “les facilita a los investigadores cubanos tener contacto con fuentes que nosotros no tenemos acceso en muchas ocasiones, entonces a través de estos resultados de investigación que ellos nos presentan, nosotros podemos ir enriqueciendo todo el acervo que tenemos acá sobre Hemingway. “

“En las bases del coloquio siempre se dice que los investigadores deben entregar al Centro de Documentación del Museo, una copia del trabajo que ellos van a presentar, por tanto, crece el fondo del Centro de Documentación del Museo y eso facilita también que los estudiantes cuando vayan a realizar sus investigaciones, sus pesquisas, tengan acceso a fuentes que quizás en Cuba no las tenemos. Estas investigaciones, una vez que se publican, los autores donan los libros también y eso va enriqueciendo los fondos bibliográficos de la entidad”.

En este sentido, Isbel  destacó:  “Es importante también, desde el punto de vista de que no solo se centra en los investigadores de la vida y obra de Hemingway, en el Museo tienen acceso a esa información los estudiantes de primaria, de secundaria,  de pre, nosotros siempre estamos abiertos, aún cuando hemos estado enfrentando procesos de restauración, procesos de mudanza de un local para otro, cuando van estos niños, con ansias de investigar, de hacer trabajos de la escuela se reciben y se les da información y se trata, aunque sean niños, de ya darles una base de lo que ya está investigado, confirmado que es real.”

Las temáticas son diversas, viajan de la literatura a la vida de un ser inquieto como Hemingway y, por supuesto, las luces sobre su relación con Cuba no pueden faltar: 

“Siempre hay algo nievo, porque cuando se habla de Hemingway muchas veces se trata de exagerar el aventurero, pero el escritor tiene mucho por investigarse todavía y qué mayor fuente de investigación que sus documentos personales y el Museo Hemingway, en Finca Vigía, es el sitio en el mundo, que tiene la mayor colección de objetos personales de Ernest Hemingway, porque fue su hogar por 21 años. Es imposible divorciar Cuba de Hemingway, esa es una unión que no se puede destruir, aunque lo hayan querido hacer durante muchos años, pero eso es imposible”.

Hemingway es todo norteamericano y muy cubano, pero va más allá, es una criatura del mundo, una personalidad sin fronteras que despierta inquietudes y emociones en los cinco continentes, la prueba serán estos días en La Habana, cuando su impronta reúne a estudiosos de los cinco continentes.