INFORME DEL COMANDANTE
FIDEL CASTRO RUZ, PRIMER MINISTRO DEL GOBIERNO REVOLUCIONARIO, EN LA REUNIÓN
SOBRE LOS PLANES PARA EL DESARROLLO ECONOMICO DE LA NACIÓN EN 1962, EFECTUADA
EN EL TEATRO PAYRET, EL 20 DE OCTUBRE DE 1961.
(DEPARTAMENTO DE VERSIONES TAQUIGRAFICAS
DEL GOBIERNO REVOLUCIONARIO)
Compañeros de las
ORI, de los sindicatos, de las JUCEI y de las empresas:
No se vayan a asustar ustedes con tantos papeles aquí
(RISAS), que esto es, en primer lugar, el proyecto de plan, un resumen y
algunas notas; no quiere decir que vayamos a leer todo este volumen en la noche
de hoy.
La reunión de hoy, como ya ustedes habrán sido
informados, es para tratar e informar sobre el proyecto de plan económico para
el próximo año.
El primer problema consistía en cómo recoger las
cuestiones más importantes de este plan y exponerlas aquí con la mayor
brevedad, dar una explicación de manera que la comprendan ustedes y, sobre
todo, que la puedan comprender todos los trabajadores y el resto del pueblo.
Para nosotros, para todos nosotros, estas cuestiones
de la planificación son nuevas. La
economía, antes del triunfo de la Revolución, era un conjunto de actividades
completamente anárquicas, es decir, no existía un plan de desarrollo económico
en nuestro país, lo que existía era un conjunto de empresas de distintos tipos,
administradas a su antojo por los dueños de esas empresas.
Las consecuencias de esa economía todos las conocemos
perfectamente bien: el subdesarrollo, el
desempleo, exceso de producción de algunos productos, escasez de otros
productos, uso arbitrario de los recursos de la nación —porque, naturalmente,
las inversiones no las disponía sino el gusto, los intereses o el capricho de
los que manejaban los recursos nacionales.
Es decir que cualquier señor que disponía del excedente de la renta
nacional, lo mismo hacía una fábrica, que compraba un barco, que construía un
palacete en Varadero o construía una casa lujosa en la Quinta Avenida o en
cualquiera de los repartos conocidos.
Las cosas ahora son completamente distintas. Es indispensable planificar la economía, es
indispensable usar de manera racional y planeada todos los recursos con que
cuenta la nación. Es decir que las
fábricas que se van a construir se construyen de acuerdo con su importancia, de
acuerdo con las necesidades. No se va a
construir una sola casa de ocho cuartos, es decir, no se va a construir un solo
palacete de 100 000 pesos, porque con esos 100 000 pesos se pueden
construir 20 casas cómodas, decentes e higiénicas, para 20 familias; nunca más se
verá aquel tipo de construcciones lujosísimas para uso particular de
nadie. Casas de esas se construyeron
bastantes ya en nuestro país, y ahora esas casas están destinadas a becados y
escuelas.
Las casas que se construirán en adelante serán para
satisfacer las necesidades de nuestra población y serán casas, como decía
anteriormente, idóneas para las familias, pero no palacetes. Eso es un ejemplo de cómo antes esos mismos
100 000 pesos, con los cuales se pueden construir 20 casas para
trabajadores, se invertían en construir
una sola casa para una familia, para una familia rica, que de esa manera usaba
la renta nacional, el producto de la renta nacional, que lo invertían
arbitrariamente, anárquicamente, según sus intereses, sus gustos y su capricho,
sin que contara para nada el interés y las necesidades del pueblo.
Además, siendo la economía algo tan fundamental para la
vida de un país y para el pueblo que tiene que vivir de esa economía, el pueblo
no tenía nada que ver con la orientación de esa economía, el pueblo no tenía
nada que ver con las decisiones que se tomaban respecto a la economía del país;
el pueblo no tenía nada que ver con las inversiones; el pueblo no tenía nada
que ver con el uso que se le daba a la riqueza nacional. Y los trabajadores, que eran los productores
de esas riquezas, no tenían absolutamente nada que ver con la economía, con esa
economía, no tenían nada absolutamente que ver con la producción, es decir, con
los planes de producción, con los planes de inversión; no tenían nada absolutamente
que ver con la forma en que se orientaba la economía del país, a pesar de que
ellos eran el factor fundamental de la producción.
Es decir que el pueblo, he ahí una de las famosas
características de la más famosa todavía “democracia representativa”, de
aquella democracia de los partido politiqueros, de los fraudes electorales, de
las compraventas de votos, de aquellas camarillas de políticos que servían los
intereses de su clase. Lo fundamental
para un país, lo fundamental para un pueblo, que es la economía de la cual vive
ese pueblo, era algo con lo cual el pueblo no tenía que ver absolutamente nada.
Sobre la economía del país decidían los grandes
bancos, los grandes propietarios de las fábricas, de los centrales azucareros,
los monopolios extranjeros, los grandes latifundistas y, en fin, el puñado de
poseedores de esas riquezas. El pueblo
no tenía que ver absolutamente nada; con el pueblo no se contaba para
nada. Por supuesto, ¡ni soñar siquiera
en una reunión como esta!, ¡ni soñar siquiera con una reunión en la cual se
encontrasen representados los trabajadores, los directores de la empresas, las
organizaciones revolucionarias, las organizaciones económicas y el
gobierno! Eso, ni siquiera soñarlo,
porque en aquel sistema de producción la economía y las decisiones eran tomadas
unilateralmente por una minoría poseedora de esas riquezas.
Hoy las riquezas pertenecen al pueblo. ¿Quién se tiene que reunir hoy para decidir
lo que ha de hacerse? Sencillamente, el
pueblo. Antes se reunían los banqueros,
ahora se reúnen los trabajadores (APLAUSOS PROLONGADOS). Antes se reunían los administradores de los
monopolios, hoy se reúnen los administradores del pueblo (APLAUSOS). Juntos, deben decidir cuáles son las metas,
cuáles son las tareas, cuáles son los recursos, cuáles son los medios con que
se cuenta para lograr esas tareas, esos
fines.
El hecho de que hoy se pueda efectuar esta reunión
significa que hemos adelantado algo, significa que hemos adelantado algo por el
camino de la economía ordenada y planificada.
La Revolución todavía no ha cumplido sus tres años en
el poder, los cumplirá (APLAUSOS);
pronto cumplirá el tercero y entrará, potente y vigorosa, en su cuarto año de
vida (APLAUSOS). Pero entrará en su
cuarto año de vida mucho mejor organizada, mucho más madura y experimentada de
lo que entró en su primer año de vida.
Durante el primer año teníamos, sencillamente, la
organización que heredábamos, los recursos que heredábamos y la incapacidad que
heredábamos. En este cuarto año tenemos
ya los recursos que hemos ido creando y preparando, la organización nueva y un
poco de experiencia. Por eso, ya en el
cuarto año de la Revolución podemos empezar con el primer plan en serio; el
primer plan, para un año, que a su vez será parte de la perspectiva de un plan
a un plazo mayor.
Este plan de este primer año de economía realmente
planificada será, inevitablemente, un plan con algunas o con muchas
deficiencias.
Tan cierto es que este plan tendrá algunas o muchas
deficiencias e imperfecciones, como que en los años venideros será cada vez más
completo, más eficiente y más perfecto.
Nosotros sabemos dos cosas: que al principio siempre hay más
dificultades, y que a medida que pasa el tiempo siempre hay más organización,
más experiencia y más perfección. Por
eso, debemos empezar comprendiendo que el primer plan no será un plan perfecto;
y, por lo tanto, debemos hacer el esfuerzo para que sea lo más perfecto posible
dentro de sus deficiencias.
Y todos los compañeros que han trabajado en la
elaboración del mismo, lo han hecho también con el deseo de hacerlo lo más
perfecto posible, aunque ellos están conscientes de sus deficiencias. El pueblo mismo empieza a conocer sobre todas
estas cuestiones, el pueblo empieza a aprender.
Todos nosotros hemos tenido también que interesarnos y
que aprender sobre todas estas cuestiones.
En la misma medida en que el pueblo comprenda, se irá dando cuenta, cada
vez más, de las ventajas de la economía planificada; se irá dando cuenta de los
grandes progresos que, mediante una economía bien ordenada y planificada, irá
logrando el pueblo. El pueblo irá
conociendo todas las metas, qué se propone año por año, cuáles son las
consecuencias y los beneficios para el pueblo del cumplimiento de todas esas
metas; el pueblo irá conociendo, por cifras, cosas que antes ignoraba por
completo, cosas que antes, incluso, no hacía nada con conocer cuando la
economía no estaba en sus manos, cuando el producto, los frutos del trabajo, no
estaban en sus manos; el pueblo irá conociendo año por año, por cifras, el
crecimiento de la economía nacional, por cifras honradas, por cifras veraces,
por cifras absolutamente ciertas. Y el
pueblo irá comprendiendo e irá percibiendo las ventajas del desarrollo y del
crecimiento de sus riquezas.
Todavía algunas de estas cifras que aquí se proponen
pueden ser revisadas; algunas pueden resultar demasiado bajas, otras pueden
resultar demasiado altas. Pero, además,
como todas las cosas siempre están expuestas a diversas contingencias: un gran ciclón puede alterar determinadas
cifras; una gran sequía, temporales de lluvia, calamidades de tipo natural y,
además, contingencias de otro tipo, no de tipo natural: agresiones de tipo militar, que es obvio que
pueden surgir contingencias que alteren en parte el esfuerzo. Pero esas contingencias son cosas, también,
con las cuales hay que contar.
Es decir que hay que contar que a pesar de todas las
contingencias, es necesario llevar adelante los planes, aunque hayan
agresiones, amenazas. Al fin y al cabo
eso ha estado ocurriendo desde el principio:
amenazas, agresiones, sabotajes, incursiones de aviones piratas, en fin,
y sin embargo hemos podido trabajar, y hasta cierto punto nos hemos
acostumbrado a trabajar y luchar en medio de esas circunstancias.
Este plan no se ha elaborado de una manera
burocrática; este plan es el resultado del estudio y del análisis de los
recursos con que contamos, los recursos naturales, los recursos en equipo, los
recursos humanos, los recursos que se han ido acumulando en estos tres años,
los recursos técnicos con que se cuenta, que han sido elaborados de abajo a
arriba y de arriba abajo. Ahora, una vez
confeccionado el plan, con todos los datos y con todas las informaciones, y con
toda la experiencia recogida, el plan va a cada uno de los órganos centrales
que tienen que ver con la economía, los que a su vez llevan el plan, en forma
de tareas y de metas, a cada una de las unidades de producción del país.
Después explicaremos cómo el plan se discute, y a su
vez regresa a la Junta Central de Planificación, hasta que es sometido al
Consejo de Ministros y se convierte en ley de la república.
Este plan es el plan que se propone al país por la
dirección política y administrativa de la nación, y se ha confeccionado
mediante el esfuerzo de un gran número de personas que, durante largos meses,
han estado trabajando arduamente, a fin de presentarlo con tiempo suficiente
para hacerlo realidad el próximo año. De
más está decirles que para el próximo año este proyecto saldrá… el proyecto
correspondiente al año 1963 será remitido a las unidades de producción, es
decir, será remitido al pueblo en el mes de julio, para disponer de mucho más
tiempo en el estudio y la discusión del mismo.
En esta ocasión no ha sido posible tenerlo antes, pero aún se dispone de
tiempo suficiente —aunque un poco apretado—para discutirlo y devolverlo.
Vamos a empezar a ver algunos datos. Vamos a partir del producto de un dato: el monto de la producción total que se
propone, de la cual naturalmente, hay que deducir la materia prima, el combustible. Es decir que para crear nuevos valores,
muchas veces —casi siempre—, hay que
invertir determinados valores; es decir, para crear un par de zapatos cuyo
valor pueda ser cinco, seis, siete pesos, hay que invertir determinada cantidad
de materia prima, hay que invertir determinada cantidad de valores en material,
cuero, puntillas, hilo, en fin, eso lo saben bien los que se dediquen a la
construcción de zapatos (APLAUSOS).
A la producción bruta hay que calcularle lo que los de
planificación le llaman insumos —esa palabrita quiere decir lo que hay que
gastar en material, combustibles, etcétera, para crear determinados valores—, y
entonces la diferencia entre el valor de la producción total y el valor de los
insumos, es decir, entre el valor de lo producido y el valor de lo que hay que
invertir en esa producción, la diferencia se llama producto bruto. Es decir que un trabajador que ha invertido
tres pesos en corriente, material, para producir un par de zapatos que vale
seis pesos, la producción bruta es seis pesos, los insumos tres pesos, ¿no?,
dijimos, de material, la diferencia son otros tres pesos. Ese es el producto bruto. Es decir que él ha creado valores ascendentes
a tres pesos al producir ese par de zapatos.
Lo mismo puede decirse en un ómnibus: los dos empleados que van en el ómnibus, lo
que ellos gastan de combustible, de equipo, en fin, para producir, por ejemplo,
10 pesos de pasaje. Quizás han gastado
cuatro, cinco o seis, de materias primas, combustibles, aceites, en fin, y han
producido 10 pesos; es decir, de la producción en bruto de 10 pesos, hay que
restarle lo que han gastado, porque han creado valores por cuatro, cinco o seis
pesos la diferencia.
El valor de la producción total agropecuaria,
industrial, de construcciones, transportes, comercio interior y comercio
exterior… Comercio exterior produce, por cuanto adquiere, por ejemplo, los
productos al valor que tienen en el mercado nacional, y los exporta. Luego de deducir el costo, los gastos, hay un
margen, y ese es el producto en bruto de las actividades del comercio
exterior. Aquí, sumando el cálculo de lo
que se propone como producción en bruto de los sectores agropecuarios,
industrial, construcciones, transportes, comercio interior y comercio exterior,
sin contar otros valores, por ejemplo, determinados servicios como es la
educación —¿quién niega el valor de la educación, los servicios que prestan
los educadores?— pues no se cuenta. Se
cuenta solo el valor de la producción total de los productos de la agricultura,
de la industria, de las construcciones, el transporte, comercio interior y
comercio exterior, ascendentes a 5 820 millones 800 000 pesos
(APLAUSOS).
Los insumos, es decir, lo que hay que gastar de
materia prima, combustible, todo eso, el valor total de lo que hay que invertir
para producir… Hay que invertir, para producir esa inversión total, invertir
propiamente lo que hay que consumir para producir eso, en materias primas,
combustible, etcétera, es de 2 604 millones 100 000 pesos. Y la diferencia es de un producto bruto, es
decir, de valores incorporados o creados, valores nuevos, creados o
incorporados por el pueblo en su trabajo; para el año 1962 se propone una suma
ascendente a 3 216 millones 700 000 pesos (APLAUSOS).
Es decir que el pueblo trabajador a través de estos
seis sectores, agropecuario, industrial, construcciones, transporte, comercio
interior y comercio exterior, creará valores ascendentes a 3 216 millones
700 000 pesos.
¿Cuánto fue —y esta es la primera pregunta— en
1958? ¿Cuánto fue? El pueblo trabajador, bajo el régimen pasado,
en 1958 creó valores por 1 996 millones de pesos, 1 996. Ahora, ya el valor de la producción ha ido
creciendo en cada uno de los años sucesivos, y lo que se propone con los planes
para 1962, es la creación de valores en bruto por 3 216 millones
700 000 pesos, frente a 1 996 millones en el año 1958. ¿Se comienza a comprender esto ya? ¿Sí o no?
(EXCLAMACIONES DE: “¡Sí!”)
Es decir que la producción del pueblo trabajador de
Cuba, el producto bruto del trabajo del pueblo de Cuba en 1963, será
aproximadamente un 65% por encima del de 1958
(APLAUSOS). Desde luego, esto
tiene que ver con mucha tierra que estaba baldía, muchos equipos que no se usaban,
muchas fábricas que estaban trabajando al 50%.
Eso lo saben ustedes. Hay
empresas industriales que hoy tienen cientos de obreros más de los que tenían
entonces; empresas que están trabajando las 24 horas, y antes, a veces,
trabajaban algunos días de la semana.
Por eso, con la misma capacidad industrial instalada que había, la
tierra que había, los equipos que había, más los nuevos medios acumulados, se
ha logrado ese aumento en el producto bruto de 1 996 millones a 3 216
millones 700 000 pesos, que es lo que se propone para el próximo año.
¿Cuáles son esos productos? Pues aquí hay una lista de los
productos. No la vamos a leer, pero está
todo: el organismo que tiene que ver con
su producción, el volumen —este volumen está en toneladas, ustedes saben que
se esta aplicando el sistema métrico, todavía cuesta un poco de trabajo
comprenderlo; las toneladas creo que hay que multiplicarlas por 22 quintales—... Y por eso donde dice 100 000 toneladas
son 2 200 000 quintales.
Tendremos que irnos acostumbrando, poco a poco, al sistema métrico, que es
el mejor, el más uniforme.
Y aquí está todo:
desde tomate, puré y salsa, bonito, langosta en conserva, cola de
langosta congelada, ancas de rana, chocolate, dulces, maltas… Maltas, por ejemplo, se proponen
50 355 000 litros. De
cervezas, por ejemplo, hay 149 863 000 litros; café crudo lavado 60 000
toneladas —son 1 200 000 quintales aproximadamente, o un poco más—,
porque realmente hay una producción grande de café. Y así, están todos.
Por ejemplo, vamos a ver si están los zapatos
aquí… Vamos a ver… Esta es la distribución de la producción;
naturalmente que esto, parte es producción nacional, parte es materia prima,
artículos, importados también, porque es el total. Claro está que lo que se importa a su vez se
paga con artículos que exportan. Y aquí
está la distribución de la producción por organismos, lo que tiene que producir
cada organismo. El INRA tiene que
producir tomate, puré y salsa, el bonito, etcétera. El Ministerio de Industrias tiene, por
ejemplo, chocolate, 9 968 toneladas; dulces, 15 540 toneladas; pan y galletas,
150 382 toneladas. Va la parte que
le corresponde a cada organismo que tiene que ver con la producción.
Ahora, ese será el total de la producción, y la
cantidad asignada a cada organismo; ahora, el consumo comercializado de la
población, ¿cuál será? Está también
calculado. Naturalmente que la población
consume lo que produce; consume también artículos de importación, y a su vez se
exporta el excedente de la producción que no se consume nacionalmente. El consumo de la población está calculado
también: tubérculos y viandas en
28 600 000 quintales; cebolla, 1 100 000; frijoles,
2 600 000; chícharos, 200 000 quintales, aves, 2 millones
de quintales; leche fresca, 979 millones de litros; arroz limpio
9 100 000 quintales.
Ustedes saben que el consumo de arroz era de 6 millones
en el año 1958; ha ido aumentando y aumentando, y se calcula para el 1962 en
9 100 000 quintales.
Azúcar refino, aquí el azúcar refino… creo que son
4 millones de quintales; café, el consumo será 900 000 quintales. Es decir, ahí tienen un ejemplo: de una producción de 1 250 000,
consumiremos 900 000, exportaremos el excedente; harina de trigo, 1 300 000
quintales; carne de res, 3 400 000 quintales; leche condensada, 1 200
000 quintales; leche evaporada, mantequilla, aceite vegetal, todo eso está
calculado; cerveza, consumo, lo que se produce, o sea aspira a producir
149 873 000 litros; tabaco, lo que se consumirá, 524 millones de
tabacos; cigarros, 17 021 millones de cigarros, que debe ser unos 1 000
millones de cajetillas; tejido de algodón, 82 467 000 metros
cuadrados.
Y sigue la lista, lo que vamos a consumir: calzado de cuero; 17 020 000
pares. ¡Hasta las motonetas están
calculadas aquí! Las motonetas que ya
están en los planes de importación, y que son para ese año 3 750 motonetas;
también cámaras fotográficas, motocicletas, en fin, los artículos
fundamentales.
Ahora bien: ya
ustedes han visto la cifra del valor en bruto de la producción. Ahora, de ese valor en bruto, producto en
bruto, ¿qué ocurre con ese producto en bruto?, ¿en qué se emplea? Pues una parte ¿en qué se empleaba
antes? Una parte era salario. Y el resto, ¿qué ocurría con el resto? Pues el resto, aproximadamente el 10% iba
para el extranjero. Es decir que antes,
de los 1 996 millones de valor del producto bruto, el 10%, es decir, cerca
de 200 millones, iba para afuera:
monopolios que percibían utilidades, personas que llevaban el dinero a
gastar en el extranjero, todo eso.
La otra parte ¿qué ocurría? Pues los dueños de ese producto, los que se
quedaban con el producto, los que administraban ese producto, pagaban una parte
en salario, otra parte iba para el extranjero, otra parte pagaban impuestos,
otra parte lo gastaban en lo que les daba la gana. Es decir, se hacían a lo mejor tres palacios,
fabricaban una residencia en Varadero, se compraban 10 máquinas. Y una parte la invertían para aumentar sus
riquezas, para aumentar sus propiedades.
Es decir que de aquel producto en bruto, el 10% iba
para afuera, otra parte lo pagaban en salarios, otra parte lo invertían en
nuevos negocios para ellos, y una parte grande lo despilfarraban. ¿Han comprendido? (EXCLAMACIONES DE: “¡Sí!”)
Creo que eso lo comprende cualquiera, ¿verdad?
¿Cuántos invertían ellos? Pues en el año 1985 de aquel producto bruto,
después de pagar salarios, pagar impuestos, botar un buen poco de dinero… botar
dinero, vamos a suponer, se iban a una ruleta, lo jugaban; se iban a
pasear. Porque cuando construían un
palacete —se me olvidaba decirles— era
inversión, inversión en un palacete; se llama inversión correctamente.
¿Cuánto invertían ellos del producto en bruto, en
edificios de apartamentos, casa, fábricas, tiendas, negocios? ¿Cuánto invirtieron en el año 1958? Pues invirtieron unos 400 millones de pesos.
Bien, ahora del producto en bruto, ¿qué pasa ahora con
el producto en bruto? Pues una parte va
a los salarios, constituye el fondo de salarios. ¿Y el resto?
Pues en primer lugar, para afuera no se va nada. De esos 3 216 millones, antes se
hubieran ido 300 millones para afuera, el 10%; ahora no se va nada. Entonces, ¿qué se hace con el excedente? Pues con el excedente hay que pagar, por
ejemplo, los servicios, es decir, educación, salubridad, inversiones en
hospitales, en caminos, en fin, lo que antes se hacía en parte, sin llegar a
satisfacer las necesidades con lo que pagaban de impuesto, pero que pagaban una
parte lo más pequeña posible.
El excedente, después de pagar los salarios, se
invierte ¿en qué? Se invierte en los
servicios que hay que prestarle al pueblo:
pensiones, jubilaciones, educación, medicinas —todo eso—, defensa del
país.
Bien, otra parte.
Reposición de la maquinaria, del desgaste de las maquinarias, y la otra
parte, después de separar una pequeña reserva —debe haber una reserva disponible— se
invierte; es decir, se invierte en inversiones de tipo productivo, y algunas
que no son productivas. Una escuela, sin
duda, es una gran inversión, pero no se llama económicamente inversión
productiva; es decir, allí se hace la instalación para los niños, para los
maestros, pero no es como una fábrica, que es una inversión que produce nuevas
riquezas. Una escuela es una inversión
que se hace para realizar los servicios de educación. Un hospital es una inversión no productiva,
pero que, sin embargo, es indispensable.
El pueblo tiene que disponer de una parte del producto de su trabajo
para atender a los enfermos, e invierte una parte de esos productos en
hospitales, donde a su vez el Estado gasta otra parte del producto, la nación
gasta otra parte del producto en pagarles a los médicos, a las enfermeras,
prestarle asistencia en el hospital.
Pero en fin, lo que se invertía del producto bruto, en
el año 1958 fue de 400 millones entre inversiones productivas e improductivas.
¿Cuál será la inversión, de acuerdo con la proposición,
para el año 1962? La inversión será,
para el año 1962… la inversión propuesta es de 883 millones 880 000 pesos
(APLAUSOS). Es decir que del producto
bruto, se propone invertir 83 millones más del doble de lo que se invirtió en
1958, con una diferencia: que en los 400
millones de 1958 se contaba como inversión la casa en Varadero, la casa de
Miramar, un club, de esos privados, eso era inversión, un cuartel —inversión—; las inversiones ahora, incluso
las inversiones improductivas, no son como aquellas, son más útiles, son más
provechosas, porque no se construyen palacetes, se construye algo mucho más
útil para el pueblo.
Ahora, esos 883 millones 880 000 ¿cómo estaría
distribuida esa inversión? Estaría
distribuida en la agricultura, en la industria, en industria de construcciones,
en transportes, en comunicaciones, en comercio, tiendas y almacenes, esas
serían las inversiones productivas; y el resto sería inversiones improductivas,
es decir, inversiones en casas, en escuelas, etcétera, como estaría distribuida.
En la agricultura se propone invertir 254 millones
200 000 pesos, de los cuales 62 millones 500 000 serán en equipos, 80
millones 180 000 serán en construcciones, es decir: silos, pesebres, cochiqueras, cebaderos, todo
eso; 111 millones 519 000 en otras:
fomento de nuevos cultivos, plantaciones, serviculturas, frutales,
maderables, etcétera. En total, 254
millones 200 000 pesos en inversiones productivas en la agricultura; 139
millones 924 000 pesos en la industria, 56 millones 172 000 pesos en
industria de la construcción y equipos de la construcción; 54 millones 511 000
pesos en transportes; 4 millones 202 000 pesos en comunicaciones; 21
millones 593 000 pesos en comercio y almacenaje.
Y ahora, como inversiones no productivas, pero
necesarias: en viviendas, es decir,
casas; en la ciudad y en el campo se
proponen 142 millones 347 000 pesos; en educación, en
construcciones para la educación 55 millones 340 000 pesos; inversiones en
salud pública 31 millones 918 000 pesos; recreo, asistencia social y
cultural, 4 millones 426 000 pesos; obras viales —es decir, caminos,
carreteras— 55 millones 341 000 pesos; acueductos y alcantarillados, 24
millones 440 000 pesos; edificaciones un millón 449 000 pesos; esto
debe ser dentro del propio plan, posiblemente (Se dirige a un compañero) aquí
las edificaciones estas… ¿eh? ….otras edificaciones…. Sí…
Urbanización un millón 91 000 pesos;
administración pública 4 millones 259 000 pesos, y otras obras
3 millones 222 000. Estos
hacen el total de 863 millones 880 000
pesos las inversiones propuestas para el 1962, y que son el doble del
total de las inversiones del año 1958.
Ya decimos que los recursos para esas inversiones
salen del producto bruto, que es el fruto del trabajo del pueblo.
Ahora, la fuerza de trabajo de todo el país —este es un dato interesante— cómo estará
distribuida ya en 1962. De una población
total calculada en 7 099 100 habitantes, de esa población total, la población
mayor de 14 años es 4 millones 551 600; la fuerza de trabajo es de
2 millones 400 600 personas.
De esa fuerza de trabajo, a la agricultura estarán dedicadas 915 000
personas; a la minería 10 200, a la
industria 462 800, a la construcción 150 000 personas, al
transporte 120 900 personas, al comercio, es decir a la distribución 188 000
personas. A la esfera de los servicios
médicos, educadores, etcétera —están
incluidos también los funcionarios de la administración pública— 339 000 personas. Y quedarán desempleados o subdesempleados,
desempleados y subdesempleados para esta fecha, un total de 214 700,
frente a 657 000 en el año 1958 (APLAUSOS).
Esto supone que en el campo no habrá desempleo en
absoluto, y ya en el campo, más que desempleo, lo que ocurre es falta de
brazos. Ya el desempleo y el subempleo
ha ido quedando, fundamentalmente, en las ciudades: servicio doméstico y una serie de trabajos
que se consideran subempleos. Ustedes
saben que también, en ese sentido, se está haciendo un gran esfuerzo, ya hay en
las escuelas nocturnas de domésticas, en el día de ayer había más de 10 000
domésticas, en el día de ayer (APLAUSOS).
Es curioso el hecho de que el número de muchachas domésticas
matriculadas en las escuelas domésticas, ha ascendido en los últimos 15 días,
sobre todo después que empezaron a trabajar las primeras en los bancos
(APLAUSOS), ha ascendido de 3 000 a más de 10 000 (APLAUSOS), y
tenemos otros planes para aumentar también el trabajo de las domésticas en
otros sectores: en el sector del
transporte; ya hay algunas noticias de esas por la calle.
Pero bueno, el hecho es que frente a los 657 000
desempleados y subempleados en el 1958, habrán quedado reducidos en el 1962 a
214 700, prácticamente va en vía de la desaparición total. Personas ocupadas en quehaceres domésticos un
millón 561 000. En el futuro aumentará
el número de personas. El aumento de la
fuerza de trabajo saldrá de las personas que están dedicadas a los quehaceres
domésticos, y entonces, de todas maneras nosotros tenemos que buscar cómo
resolver el problema de la falta de brazos.
Incapacitados e internados, que incluye los que estén
recluidos más o menos en los hospitales por otras causas de incapacidad 97 000;
estudiantes, pensionados, fuerzas armadas y otros, 493 000; ese es el
cálculo, así es como se divide del total de 7 millones 99 100
personas de la población total. ¿Ya
tienen una idea? Así que en la
agricultura, en la minería, en la industria…
El presupuesto del Estado. Los egresos, es decir, ¿cuál será el gasto
del Estado? Incluye empleados públicos,
empresas, incluso también inversiones en empresas nacionales. Será de 1 657 millones 100 000
pesos.
Eso se distribuirá así: de salarios, es decir, todos los empleados
públicos y los distintos trabajos —aquí
no están contadas las empresas nacionalizadas—, a maestros, empleados públicos,
todos, incluye también fuerzas armadas, en fin, todos los que cobran
directamente del presupuesto, serán 366 millones 100 000 pesos; becas, 21
millones de pesos (APLAUSOS); pensiones y jubilaciones, 171 millones de pesos;
servicios de la deuda pública interior, 5 millones de pesos;
indemnizaciones por adquisición de establecimientos, 6 millones de pesos;
transferencias al exterior, 3 millones de pesos; consumo material del
sector improductivo estatal, 101 millones 119 000 pesos; consumo de
servicios, 10 millones de pesos; inversiones presupuestadas, 190 millones;
inversiones en empresas públicas, 633 millones 866 000 pesos; reserva
financiera, 120 millones de pesos; aumentos de depósitos, 30 millones de
pesos. Esos son los egresos del
presupuesto del Estado.
Los ingresos:
aporte neto de empresas socialistas, 1 004 millones 361 000
pesos; contribución a la seguridad social de empresas socialistas, 101 millones
516 000 pesos; impuestos a empresas capitalistas, 107 millones;
contribución a la seguridad social de empresas capitalistas, 39 millones de
pesos; impuestos, 141 millones 183 000 pesos; contribución a la seguridad
social de la población, 130 millones de pesos; aportación a la
industrialización, 72 millones de pesos; aumento de créditos bancarios, 62
millones de pesos. Esas son las fuentes
de esos ingresos, por distintos conceptos, impuestos y todo.
Así que hasta aquí hemos visto algunos datos sobre el
producto bruto que se propone el país, las inversiones que se propone, y por
qué conceptos se proponen esas inversiones.
Ahora, eso hasta aquí, resumido con otros muchos datos que es
innecesario leer.
Aquí está el plan ya con las instrucciones a cada
organismo. Esto es lo que recibe cada
uno, comprende las instrucciones que recibe cada organismo del Estado, que
tiene que ver con la economía; aquí están las instrucciones que recibe el
Instituto Nacional de Reforma Agraria, el Ministerio de Industrias, el
Ministerio de Obras Públicas, Viviendas Campesinas, el Ministerio del
Transporte, el Ministerio de Comercio Interior, el Ministerio de Comercio
Exterior, el Instituto Cubano del Arte e Industria Cinematográficos, la
Imprenta Nacional de Cuba, el Ministerio de Comunicaciones, el Instituto
Nacional de la Industria Turística.
Todos esos organismos, aquí están comprendidas las instrucciones que
reciben esos organismos, de acuerdo con los planes.
“Tareas e instrucciones para los jefes de los
organismos centrales económicos en la confección del plan para el desarrollo de
la economía para 1962.” Aquí tenemos,
por ejemplo, sector agropecuario, las instrucciones que recibe: “Primero —voy, por vía de ejemplo, a
leerles algunos detalles—:
confeccionar el plan de producción agropecuaria para granjas y
cooperativas, ANAP y sector privado, de manera de alcanzar una producción bruta
de 1 341 millones 500 000 pesos, y cumplir con los volúmenes físicos
que aparecen en la tabla de necesidades que se entrega adjunta. Dos:
elaborar un plan de inversiones agropecuarias por la suma de 204
millones 200 000, según se detalla en hoja adjunta. Contratar con el Ministerio de Obras Públicas
y Viviendas Campesinas construcciones por valor de 80 millones 180 900
pesos para las inversiones antes mencionadas, etcétera.” Así están todas las instrucciones.
Las instrucciones, también, para las industrias
alimenticias, porque el INRA tiene la agricultura y las industrias
transformadoras de estos productos. Así
que: “Elaborar un plan de producción industrial
según la cual la misma alcance un valor de 397 millones 272 000 pesos.”
Es decir que se le da a cada organismo central que
tiene que ver con la economía las metas, se le dice lo que tiene que hacer y
con qué cuenta para hacerlo, con qué cuenta en materia prima, en combustible,
en equipos, en fuerza de trabajo. Es lo
que se propone a cada uno de esos organismos.
Se le dice lo que debe hacer, lo que se cree que puede hacer; se le
propone y se le dice con qué recursos cuenta en materias primas, combustible,
equipo y fuerza de trabajo.
Se le dan las instrucciones de lo que debe hacer cada
organismo, se le señala qué debe producir.
Por ejemplo, cuánto debe producir en caña, cuánto debe producir en maní,
en semillas de algodón, en frijol de soya, en aceite vegetal, etcétera. Aquí hay 204 productos, los más importantes.
Las cantidades de cada uno de estos productos, es
decir, cuánto tiene que producir en caña, cuánto tiene que producir en plátano,
en banano, en miel de abejas, en coco, en piña, en jugo de piña, en fin, todo
eso. A quién debe entregar lo que
produce, cuánto debe entregar a cada uno de esos organismos.
Por ejemplo, la harina de maní, se la debe entregar el
INRA al propio INRA, porque lo dedica, por ejemplo, a los alimentos de los
animales; la harina de algodón, la harina de soya, la harina de carne; los
cítricos, la cantidad que tiene que entregar al Ministerio de Industrias para
refrescos, la cantidad que tiene que entregar al Ministerio del Comercio Interior
para su distribución a la población, la cantidad que debe entregar al
Ministerio del Exterior para su exportación; en maderas duras, por ejemplo, de
maderas duras, a quién le tiene que entregar esa madera dura, las traviesas,
los jugos de frutas, las frutas en conservas, todo eso; el arroz que produce, a
quién lo debe entregar, la cantidad que debe producir. Aquí, por ejemplo, está la cifra: 205 000 toneladas, a quién se las debe
entregar: al Ministerio de Comercio
Interior. Y así todos los productos, que
se les señala la cantidad que debe producir de cada uno de ellos; a su vez, las
cosas que necesita para producir eso.
Por ejemplo, necesita mieles. ¿Quién se lo debe entregar? El Ministerio de Industrias le debe entregar
las mieles al INRA para esa producción.
Por ejemplo, ¿quién le debe entregar las distintas materias primas que
necesita, bien sea de producción nacional o bien sea de importación? Si es de importación, se lo tiene que
entregar el Ministerio de Comercio Exterior; si es de producción nacional,
artículos industriales, se lo tiene que entregar el Ministerio de
Industrias. Y hay algunos artículos
agrícolas, materia prima agrícola, que el INRA, por ejemplo, lo produce y se lo
entrega a las industrias del INRA.
Así que, aquí tienen:
mieles, se la debe entregar el Ministerio de Industrias; cantidad: 137 500 toneladas. Azúcar crudo, se la debe entregar también el
Ministerio de Industrias, que son como 88 000 toneladas, son las que
necesita para las conservas, fabricar dulces en conserva. El alcohol natural, se lo debe entregar el
Ministerio de Industrias; se señala la cantidad. El azufre, lo debe entregar, por ejemplo, el
Ministerio de Comercio Exterior; la sosa cáustica, el Ministerio de Industrias;
el nitrato de amonio, el Ministerio de Industrias —esto es para los abonos y
para todo eso. Es decir que se le señala
a ese organismo lo que debe producir, cantidad exacta de cada uno de los
artículos, de cada uno de los productos, y la materia prima que necesita, el
combustible, todo lo que necesita para poder cumplir esa meta, de qué organismo
lo debe recibir y en qué cantidad.
Ahora, la producción industrial… No, todavía en la parte
agrícola. La inversión
agropecuaria: entonces se le señala
también qué inversiones debe hacer, aquí se le señala.
Debe invertir, por ejemplo, en plantaciones diversas, 57
millones de pesos; en fomento de pastos, 8 millones de pesos; regadío y
drenaje, 6 millones de pesos; mecanización y equipo, 62 millones de pesos;
almacenes, 9 millones; silo, un millón 200 000 pesos; en ganado vacuno,
17 millones de pesos —es decir, construcciones para ganado vacuno—; construcciones
para ganado porcino 35 millones de
pesos; construcciones para aves, 15 millones de pesos; otras construcciones, un
millón 200 000 pesos; reparaciones generales, 10 millones de pesos;
aumento del ganado, 19 millones 800 000 pesos; en yuntas de bueyes —porque
también esa es una inversión, que se están empleando las yuntas de bueyes—,
2 millones 5 000 pesos; importación de reproductores, 6 millones
600 000 pesos.
Aquí también están las inversiones por barcos de pesca,
5 millones 200 000 pesos; otros equipos, 2 millones 800 000
pesos. Es decir, del total de la
inversión, que se había señalado aquí para agricultura, los 254 millones en
inversiones se desglosa y se le señalan al organismo todas las inversiones que
debe realizar, una por una.
También las inversiones industriales: en dos mataderos industriales, 2 millones
500 000 pesos; en dos plantas extractoras de aceite de maní, un millón 260 000
pesos; una extractora de aceita de soya, 450 000 pesos; una extractora de
aceite de algodón, un millón 240 000 pesos; 32 silos industriales, 172 000
pesos; en fábricas de pienso, 110 000 pesos, etcétera. Aquí hay 16 plantas de pasteurizar, 2 millones
500 000 pesos.
Al Ministerio de Industrias se le hace exactamente igual,
se le dan las instrucciones precisas:
“Confeccionar un plan según el cual las empresas dependientes de ese
Ministerio alcancen una producción que tengan un valor —producción bruta total— de 1 718
millones 10 000 pesos garantizando su volumen físico de la producción y de
la entrega de acuerdo con las especificaciones del cuadro de necesidades de
entrega que se acompaña. Se adjunta una
proposición de cómo quedaría distribuida esta producción entre las empresas
dependientes de ese ministerio. Designar
las empresas suministradoras de los artículos producidos por ese organismo, a
que se refiere el adjunto cuadro:
necesidades de entregas”, etcétera.
Tiene todas las instrucciones.
Se le señala todos los artículos que debe producir, a
quién debe entregar. Por ejemplo,
mieles. Ya ustedes vieron. Cuando se trataba del INRA, necesitaba
mieles, ¿quién se lo tenía que entregar?:
el Ministerio de Industrias.
Entonces, aquí: “ El Ministerio
de Industrias tiene que producir miles, para entregar al INRA —una cantidad, la
que señalábamos—; para entregar al Ministerio del Exterior, para exportación —otra
cantidad—; para entregar al Ministerio de Comercio Interior —otra cantidad. Azúcar crudo —lo que debe producir, de
acuerdo con todos los planes—: para
entregar al INRA, al Ministerio de Comercio Interior, al Ministerio de Comercio
Exterior. De azúcar refino, de alcohol
natural, de alcohol absoluto, de alcohol desnaturalizado, levadura, ron, tabaco
torcido, cigarrillos, bagazo, tabla, cemento.” Se le señala todo lo que tiene
que ir produciendo, y a quién le debe entregar.
Aquí tenemos, por ejemplo, de cemento: “Debe entregar al Ministerio de Obras
Públicas, 641 000 toneladas; a Viviendas Campesinas, 239 000
toneladas; al INRA, 6 000 toneladas; al Ministerio de Comercio Exterior,
70 000 toneladas; a Transportes, 30 000 toneladas.” Se le señala lo
que debe producir y a quién se le debe entregar. Ladrillos de bloques, sanitarios de cerámica,
la que debe entregarle al Ministerio de Comercio, de Industrias, la que debe
entregar a Obras Públicas, la que debe entregar a Viviendas Campesinas; cloro,
pirita, ácido sulfúrico, sulfato de sodio, níquel, por ejemplo cuánto tiene que
producir de níquel y a quién se lo debe entregar. Aquí se señala la cantidad y que debe ser
entregado al Ministerio de Comercio Exterior, para la exportación. Cobalto, cuánto debe producir y a quién se lo
debe entregar; jabón de
lavar, cuánto debe producir, a quién se lo debe entregar: al Ministerio de Comercio Interior; jabón de
tocador, detergente, amoníaco, ácido nítrico, nitrato de amonio —para el INRA—, fertilizantes complejos, 55 000
toneladas, que debe entregar al INRA, y así va todo señalándose.
Los tejidos, los neumáticos, calzado de goma. Glicerina, vestidos y trajes, es decir, los
productos que quedan a cargo del Ministerio de Industrias.
A su vez, hay una lista de lo que necesita él, de qué
organismo lo debe recibir y en qué cantidades.
Y así, sigue.
Aquí está el plan de inversiones de industrias. Están divididas en: inversiones industriales de pago corriente,
es decir, las que pagamos con nuestros recursos; inversiones industriales de
crédito a largo plazo, las que se van a construir con los créditos que hemos
recibido; inversiones industriales, otras construcciones, lo que se va a
invertir, por ejemplo: industria
eléctrica “Antonio Guiteras”, en Empresa Consolidada del Petróleo y en otras
inversiones.
Inversiones industriales de pago corriente. Fábricas que van en 1962 —aquí van las
fábricas que se hacen en 1962, las fábricas que se empiezan a construir en
1962, porque hay fábricas que dura dos o tres años la construcción, entonces la
parte que corresponde a 1962 va aquí también en las inversiones. Aquí están:
fábrica de electrodos para soldar, fábrica de alambre de púas, fábrica de cerraduras y
candados —lo que se invierte en equipo, el costo total, está todo aquí—, bujías
de encendido, fábrica de beneficiadora de caolín, artículos plásticos,
ensamblaje de radio y televisión, hilanderías kenaf, ampliación “Owen Illinois”, de bicicletas, de
planta mecánica, de máquinas de coser, de limas, brocas, escareadoras y fresas,
arandelas de presión, lápices y anexo, motores diesel y compresores, cepillos y
brochas, maceradoras de kenaf, ampliación “Acetafil”, fábrica de repuestos de
maquinaria agrícola, refinería de sal, fundición de Manzanillo, inversiones
“Corrales”, ensamblaje de automóviles, moldes y troqueles, escuelas de
aprendices automóviles, molino de trigo, “Técnica Cubana” ampliación, “Pulpa
Cuba” ampliación, fundición a presión metales no ferrosos, bolas forjadas,
etcétera. Este es inversiones
industriales de pago corriente por 22 millones 322 000 pesos.
Inversiones industriales de crédito a largo
plazo: proyecto de carburo de calcio, de
herramientas de mano, el INPUD —que es
la fábrica de cocinas, televisores, todo eso—, reconstrucción de la industria
metalúrgica, fundición de acero por arco eléctrico, astillero de Mariel,
fundición de hierro gris y maleable, vidrios planos y pulidos; por valor de 20
millones 218 000 pesos, para el año que viene. Algunos de los proyectos llevan dos o tres
años.
Otras construcciones a realizar: tubos de acero con costura, hilandería
Alquitex, planta desestañadora “Taosa”, refinería de sal, vajillas de losa,
amplación “Ribbon Fabric”: 6 millones
53 000 pesos.
En la industria eléctrica “Guiteras”, las inversiones
para 1962: en plantas generadoras, 16
millones 140 000 pesos; en transmisión y subtrasmisión, 13 millones 477 000
pesos; en distribución 10 millones 95 000 pesos. En total de inversión en industria eléctrica
“Antonio Guiteras” será de 39 millones 712 000 pesos.
En la Empresa Consolidada del Petróleo, aquí están
detalladas todas las inversiones:
concepto de instalación de hidrofinador planta 3, instalación de
sulfurizadoras, etcétera, están aquí.
Asciende a 16 millones 10 000 pesos. Y, por fin, la Empresa Consolidada del
Petróleo, en total: entre
construcciones, equipos y todo de petróleo; y otras inversiones, 4 millones
500 000 pesos.
Ya esto se está terminando, o mejor dicho, lo que
tenemos que ver de esto (señala documentos).
Aquí también el Ministerio de Obras Públicas, lo que
le corresponde al Ministerio de Obras Públicas, las instrucciones al Ministerio
de Obras Públicas, igual que a todos los demás organismos centrales. Son varios puntos, tienen 15 puntos las
instrucciones.
La primera dice:
“Elaborar un plan de construcciones según el cual el valor de las
construcciones a llevar a cabo por ese ministerio ascienda a la suma de 322
millones 900 000 pesos, de acuerdo con las especificaciones que se
detallan adjunto. Dos: Elaborar
un plan de inversiones en empresas de la construcción por una suma de 40
millones 503 500 pesos, de acuerdo con las especificaciones que se
adjuntan”, y así… El material que necesita, qué organismos se lo debe entregar,
y en qué cantidad.
La producción, el trabajo de obras públicas. Los 322 millones de construcciones estarán
distribuidos así: Pinar del Río, 22
millones 500 000 pesos; La Habana, 72 millones 800 000 pesos;
Matanzas, 14 millones 900 000; oeste de Las Villas, 14 millones 300 000
pesos; este de Las Villas, 30 millones 100 000 pesos; Camagüey, 21
millones 900 000 pesos; norte de Oriente, 33 millones 800 000 pesos;
sur de Oriente, 74 millones 200 000 pesos; obras a determinar ubicación,
37 millones 700 000 pesos; ajustes de servicios, 700 000 pesos.
Tipos de obras:
en construcciones agrícolas —aquí ahora está especificado por el sector
al cual se dediquen esas obras—, en escuelas, en hospitales, en círculos
sociales, en edificaciones, en obras viales, todo.
Lo que tienen que producir las empresas de producción
industrial del Ministerio de Obras Públicas; lo que tiene que producir en
cerámica roja, en asbesto —cemento, en carpintería, en cantera, en piezas de
hormigón, en concreto premezclado, en mármol, en mosaico, en asfalto.
Viviendas campesinas, lo que tiene que producir. Las viviendas campesinas serán 12 500,
las viviendas urbanas serán unas 17 000; total, cerca de 30 000
viviendas.
Y así está todo, lo que tiene que hacer Comercio
Interior, lo que tiene que hacer el Ministerio de Comercio Exterior, lo que
debe comprar, a quién le debe entregar lo que compre, lo que bebe vender, de
qué organismo debe recibir lo que va a vender, lo que va a exportar.
Dice así —primero para el Ministerio de Comercio
Exterior—, dice: “Elaborar un plan de
importación por un total de 922 millones 429 000 pesos, asegurando la
importación de los volúmenes físicos estipulados en la hoja de necesidades y
entregas que se adjunta, así como los equipos y fábricas completas para los
distintos planes de inversiones, que también se incluyen. Contratar la importación de la diferencia
entre 922 millones 429 000 pesos y el valor total de los volúmenes físicos
especificados en la hoja de necesidades de entregas, así como los equipos y
fábricas completas mencionadas, directamente con los organismos centrales, de
acuerdo con la lista de prioridades que se adjunta.” Y así, aquí está todo lo que debe importar y
lo que debe exportar el Ministerio de Comercio Exterior.
En eso consiste este grueso volumen (APLAUSOS
PROLONGADOS).
¿Es este el plan definitivo de 1962? No, este no es el plan definitivo de 1962,
este es el proyecto de plan. ¿Qué camino
tiene que recorrer? Ahora va a cada uno
de esos organismos, que ya tienen sus instrucciones. ¿Qué tienen que hacer los organismos? Entonces, ahora cada organismo tiene que
hacer el plan que le corresponde a cada unidad de producción.
Al INRA, por ejemplo, le han dicho: “Tiene que producir tanto, tanto y tanto;
cuenta con tal equipo, con tales combustibles, con tales recursos.” Ahora, el INRA tiene que asignarle a cada
granja su tarea, de acuerdo con el equipo con que cuenta, el combustible, la
materia prima; tiene que asignarle a cada cooperativa su tarea, y tiene que
asignarle a la ANAP —es decir, a la
Asociación Nacional de Agricultores Pequeños— su tarea. La ANAP, a su vez, distribuye la parte que le
corresponde entre todas las asociaciones de agricultores; la Administración Nacional de Cooperativas
Cañeras distribuye lo que le corresponde a la administración entre todas las
cooperativas; la Administración de Granjas del Pueblo distribuye lo que le
corresponde entre todas las granjas. Ya
en este plan se propone: tanto para
cooperativas, tanto para granjas… Ellos van ahora a cada unidad de
producción. Es decir que el plan tiene
que bajar a cada una de las unidades de producción.
El organismo central correspondiente, distribuye las
metas y los recursos entre todas las unidades de producción. Entonces, el jefe de la unidad de producción,
en unión de los asesores técnicos y de los jefes de departamento de la unidad
de producción, se reúne y prepara la discusión de la parte del plan que le
corresponde, con los trabajadores de esa unidad de producción.
Es decir que este plan general, en el cual se asigna a
cada organismo su parte, cada organismo envía la parte del plan que se propone
correspondiente a cada unidad de producción.
Entonces ahora es que se va a discutir en la base. Ahora el Che, por ejemplo, recibe la parte
que le corresponde a la industria (APLAUSOS).
Al Che le dicen, le dan estas instrucciones: “confeccionar un plan según el cual las
empresas dependientes de ese ministerio alcancen una producción que tenga un
valor total de 1 718 millones, garantizando su volumen físico,
etcétera”. Le dan todas las instrucciones,
le dicen lo que tiene que producir el ministerio, qué productos, a quién los
debe entregar, lo que necesita para producir eso de qué organismo lo debe
recibir. Entonces ahora él reúne allá a
todos los administradores de los consolidados, con sus respectivos consejos
técnicos y jefes de producción; entonces ellos se distribuyen cada
consolidado. Por ejemplo, el de la
minería tiene que distribuir entre todas las minas, todas la unidades de
producción, las cantidades señaladas:
cuánto le toca a la Nicaro, cuánto le toca a la… —¿cómo se llama la
otra?
CMDTE ERNESTO GUEVARA.- Es una empresa aparte. El níquel es aparte de las minas.
CMDTE FIDEL CASTRO.-
Bueno. El níquel dice el Che que
es una empresa aparte; me imagino que sea la de elaboración de los productos,
¿verdad? ¿No está en el consolidado de
la minería? ¿En dónde está?
CMDTE ERNESTO GUEVARA.- En la Empresa Consolidada del Níquel.
CMDTE FIDEL CASTRO.-
En la Empresa Consolidada del Níquel, y pertenecen la Moa y la Nicaro.
Es decir que si aquí le han dicho al Ministerio de
Industrias que tiene que producir 22 500 toneladas de níquel —no es ningún
secreto el cobalto este, ¿verdad?— (RISAS), y 20 000 toneladas de
cobalto… Eso es lo que le han dicho al
Ministerio de Industrias que tiene que producir de níquel y de cobalto. Entonces el Ministerio de Industrias tiene
que llamar al Consolidado de Níquel y decirle:
nos han dado esta tarea. ¿El
cobalto y el níquel están en la misma empresa, verdad?... Es en el mismo consolidado. Entonces, ellos, en primer lugar, también le
han dicho con qué cuentan, qué equipo tienen, qué materias primas necesitan,
cuánto le va a dar de combustible para eso, cuánto le van a dar de materia
prima, en fin. Entonces el consolidado
estudia la posibilidad, le asigna a las dos empresas correspondientes su tarea;
entonces, se le hace la proposición a cada una de las unidades de producción,
es decir, el consolidado del níquel a cada una de las unidades le hace su
proposición. Entonces, llega allí la
proposición; se reúne el jefe de esa unidad de producción, de la Nicaro, por
ejemplo, con los asesores técnicos, con los jefes del departamento de
producción, y dicen: nos han propuesto
producir tanto, con tanto combustible, tanta materia prima, tantos trabajadores, tantos recursos. Entonces ellos discuten. ¿Qué pueden hacer? ¡Ah!, entonces discuten allí el plan; el jefe
de la unidad, con los asesores técnicos y los jefes de los departamentos,
prepara una asamblea con los trabajadores; entonces los trabajadores
dicen: no, esa cifra es poca, ¡nosotros
podemos producir más! (RISAS Y APLAUSOS.)
Ahora bien, a cada unidad se le da una cifra mínima de
producción con recursos máximos. Es
decir, se te va a dar tanto combustible, tanto equipo, tantos trabajadores; con
eso de máximo tienes que producir un mínimo de estos. ¿Qué pueden hacer en la unidad de
producción? No pueden cambiar los
recursos que van a recibir, porque no pueden decir: necesito 1 000 obreros más, o necesito
50 buldóceres más, porque ya los equipos, la materia prima, están distribuidos, eso no se puede
cambiar. Ellos no pueden alterar los
recursos que van a recibir, no pueden decir:
denme más de eso. Por excepción,
¡por excepción!, se pudieran reconsiderar las cantidades asignadas. Pero, en general, ni materia prima ni equipos
van a recibir más.
En cambio, sí pueden aumentar la producción, porque puede
haber ahorro de combustible, ahorro de materias primas, ahorro de tiempo. Todo depende de una mejor organización de la
unidad de producción.
Entonces en el centro, en la unidad de producción lo
discuten todos: administradores,
asesores técnicos, jefes de departamentos, obreros; discuten lo que le han
asignado a su unidad. Entonces, devuelven
al organismo correspondiente el plan, con las aclaraciones o las proposiciones
que estimen pertinente. Pueden decir,
sencillamente: ese cálculo está
equivocado. Con tales recursos, con
tales cosas, pues se puede llegar a producir tanto… Ellos dan ahora su información, porque ellos
son los que tienen que ejecutar el plan; va a dar su opinión. A su vez, esa opinión la recibe el Ministerio
de Industrias; la recibe el consolidado primero. El consolidado recibe la opinión que le dan,
y las proposiciones que le hacen los obreros y los administradores de las
empresas de níquel; el consolidado se lo comunica al ministerio, el ministerio
lo comunica a la JUCEPLAN; JUCEPLAN, después que recibe otra vez el plan, ya
después que se ha discutido en todos los organismos y en todas las unidades de
producción lo recibe, lo vuelve a reordenar…
Creo que le llaman… el trabajo que hace es de compensar…
CMDTE ERNESTO GUEVARA.- Compatibilizar.
CMDTE FIDEL CASTRO.-
¡Ah!, compatibilizar. ¡Esa es la
palabra! (RISAS.) Compatibiliza el plan. Es decir, confronta lo que él envió con lo
que él recibió, y vuelve a hacer entonces un plan definitivo, basado en la
realidad de todo lo que se ha discutido en la base.
Entonces, una vez que ya ha recibido toda esa
información y la ha compatibilizado… (APLAUSOS.)
Yo no era el más apropiado para dar la explicación
esta. Yo creo que hubiera estado mucho
más apropiado el compañero Boti, el compañero Carlos Rafael, y los compañeros
que trabajan en la JUCEPLAN; pero me dieron esta tarea. ¡Parece que estaba en el plan,
también!... (RISAS) … la tarea de impulsar un poco, hablar de
todos estos problemas. Yo les estoy
explicando lo que yo entiendo (RISAS).
Si algo yo lo he entendido mal… (APLAUSOS), si algo lo he entendido mal,
¡entonces no respondo de cómo lo entiendan ustedes! Pero creo que más o menos es así como lo
hemos entendido y lo estamos explicando.
¡Y hay tiempo de rectificar las equivocaciones también, de nosotros, y
de compatibilizar nuestros conocimientos!
(RISAS.) Ya saben que esto
significa un compromiso.
Entonces, después que la Junta de Planificación tiene
ya confeccionado el plan definitivo,
después que ha ido a la base y lo han discutido los trabajadores y todos los
que tienen que ver con la producción, entonces se hace el proyecto definitivo,
se presenta al Consejo de Ministros, y se aprueban. Tiene que estar el 31 de diciembre ya otra
vez en la JUCEPLAN. No, el 31 de
diciembre no: el 1ro de diciembre, el
1ro de diciembre; es decir, que hay unos 40 días para toda esta discusión. Entonces ya el día 31 de diciembre tiene que
ser aprobado por el Consejo de Ministros a más tardar, y empieza a regir el 1ro
de enero de 1962 (APLAUSOS).
Al cumplirse el cuarto año empieza el primer
plan. Todavía no es el plan que debe ser
de cuatro años; pero ya este plan es el plan del primer año de lo que será un
plan de mayor alcance y de mayor plazo,
porque los planes no se pueden hacer por años.
Los planes se hacen cuatrienales, quinquenales y septenales. Yo creo que la Unión Soviética los está
haciendo… ¿Cómo son ahora, septenales, no?
(APLAUSOS.) Nosotros estamos
empezando en la planificación.
Entonces, sí ya se está trabajando en las perspectivas
del plan de cuatro años. El plan de cuatro años todavía no está, ¿saben?;
todavía nada más están las líneas generales, porque hay que irlo… para hacerlo
bien hecho. Hay una cosa que debe
tenerse en cuenta: que no había
estadísticas absolutamente de nada, no había información ninguna. El trabajo más difícil es, precisamente, en
esta etapa, por falta de información, por falta de estadísticas, pero se va
trabajando seriamente, tropezando, levantándose, cayendo, volviendo a
levantarse. Y, en fin, ya hay un notable
progreso en este campo. Y, entonces todo el mundo irá entrando ya por la
planificación. Además, no podía ser de
otra manera. Aquí antes, por ejemplo, el
cemento sobraba; ahora el cemento no alcanza para todas las obras, hay incluso
que importar cemento, mientras se hacen las fabricas nuevas.
¿Qué quiere decir eso?
Que hay que distribuir muy bien la materia prima con que se cuenta; si
no se hace esa distribución se empiezan a hacer obras y de repente paralizadas
las obras; al paralizarse las obras, pues dinero que se desperdicia, se gasta,
jornales que hay que pagar; muchas veces los obreros sin que puedan rendir las
tareas por falta de material. Ustedes
pueden por eso comprender la importancia de distribuir los recursos y el
material adecuadamente, para que las obras mantengan su ritmo y la producción se mantenga.
Así que ya tendremos bastante serio un plan para el
año 1962, ya discutido, con la base, con los obreros, con todas las unidades de
producción.
¿Y qué significa esa discusión? Pues tiene que ser una discusión franca,
abierta, democrática, constructiva, positiva, en todas las unidades de
producción. ¿Quién puede saber mejor que
los propios obreros y los propios jefes de los departamentos, el propio Consejo
Asesor, los propios jefes de la unidad de producción, las metas que pueden
cumplir?
Si el plan se hiciera desde arriba y no se discutiera
abajo, ¿qué plan sería? Un plan burocrático. Ahora, ¿por qué el plan no es
burocrático? El plan recoge los datos,
las informaciones de los recursos con que se cuenta, de los equipos, de los
técnicos, hace un proyecto, y no lo aprueba, no lo lleva al Consejo de
Ministros y lo aprueba; ¡ahí va ese plan!
No. Ese plan antes de hacerse
definitivo va a la base y se discute; la base lo discute y lo devuelve. Luego ese plan definitivo se ha hecho sobre
bases muy reales. Después que el pueblo
ha participado; la participación democrática del pueblo en lo fundamental que
es la economía; la participación de cada obrero en los planes de su fábrica, en
la producción, en la parte que le corresponde en la producción nacional; la
participación del pueblo en los planes generales, porque el pueblo debe informarse. Esa discusión significa que se ha hecho un
plan sobre bases reales y, al mismo tiempo, significa un compromiso serio, de
honor, de los obreros, de los administradores, de los asesores, de los jefes de
departamentos, de los sindicatos y de las ORI.
Porque en esa discusión tiene que participar el
sindicato y tienen que participar las Organizaciones Revolucionarias
Integradas, los Núcleos revolucionariosde las fábricas (APLAUSOS). Ahí queda comprometido todo el mundo: quedan comprometidos los trabajadores, los
administradores, los asesores técnicos; quedan comprometidos los Núcleos
revolucionarios, los sindicatos, los JUCEI, la ORI municipal, la ORI
provincial, el ministerio, el gobierno; todo el mundo está comprometido en esa
meta (APLAUSOS).
Esa participación de todos en la confección y en la
discusión del plan, es garantía de su cumplimiento, es garantía del esfuerzo de
todos para lograr que las metas que aquellas fábricas, que aquella unidad hizo,
se cumplan. Aquí queda comprometido todo
el mundo, todos los organismos; el que da y el que recibe, el que tiene que
entregar materia prima, madera, todo.
Después tendremos las discusiones de cómo va todo. Entonces tendremos las asambleas de
producción también.
¿Cuándo debemos tener la asamblea de producción? Les voy a decir: posiblemente al cumplirse ese primer año del
plan. Esta vez fue a mediados de año,
será a fin de año o al año siguiente, para que entonces venga todo el mundo a
dar cuenta de lo que hizo ante el pueblo (APLAUSOS). Esto no es cuestión de que faltó el pescado,
faltaron los frijoles, faltaron las aves.
No. Aquí ya le hemos puesto metas
a todo el mundo. ¡Ah!, después tenemos
que venir a discutir ante el pueblo.
Entonces tiene que venir Salvador aquí a explicar, si faltó el pescado,
por qué faltó el pescado. Y, sobre todo,
nosotros tenemos esperanzas de que venga a explicar por qué sobró el pescado
(APLAUSOS).
Y aquí tiene que venir el compañero Santos Ríos, si
faltan los frijoles o si falta la malanga; y aquí tiene que venir el compañero
Serrate, el compañero Martell, todos los compañeros del INRA, si alguno de esos
artículos falta. Y si sobra, mejor. Y
todos los compañeros de las ORI que tienen que ver con esto. El compañero Severo Aguirre tiene que
comparecer también aquí si falta alguno de los productos; o si sobra también
(APLAUSOS).
Aquí tiene que comparecer todo el mundo, cuando venga la
asamblea de producción, a explicar lo que ha hecho. La dirección y la base, porque la otra vez la
asamblea fue un poco más corta; posiblemente tengamos que dedicarle cuatro o
cinco días, y que todo el mundo, fábricas, administradores de granjas, de
cooperativas, que todo el mundo se ponga al hilo, tiene que ponerse al hilo
todo el mundo.
Entonces habrá que explicarle al pueblo las metas, por
qué tal meta no se cumplió, dónde estuvo el fallo. De manera que queda la obligación no solo de
cumplir el plan que el pueblo se ha asignado, cumplir las metas que el pueblo
se ha asignado, sino los que tienen responsabilidad con su cumplimiento explicarle
al pueblo los resultados que hayan obtenido.
Esa es la ventaja del plan, de la discusión amplia,
democrática, constructiva, de todo ese plan.
Nadie puede alegar después
que él no tiene culpa. Es decir, si él se equivocó, si los
compromisos que hizo de acuerdo con los informes que tenía estaban equivocados, no le puede echar
la culpa a nadie; él es el equivocado.
Entonces el pueblo irá conociendo todo el itinerario de su desarrollo
económico.
Este proyecto cuando sea definitivo se debe divulgar para
que el pueblo se entretenga viendo números, leyendo, estudiando. Y vaya conociendo cada vez más de cosas de
plan; porque mientras más conozca cada trabajador, cada revolucionario, cada
dirigente sindical, cada jefe de empresa, mientras más conozcan todos estos
problemas de la planificación, más garantía del éxito del desarrollo de nuestra
economía.
Ya saben: a
estudiar planificación todo el mundo, a estudiarse el proyecto que aquí
está. Esto obliga a los planificadores a
no equivocarse, porque a veces los planificadores se equivocan, hacen una suma
que no está bien; algo lo suman dos veces, hay algo que lo suman dos veces y
hay error. Entonces tendrán mucho más
cuidado al confeccionar el plan, que no haya equivocaciones. Así que la vigilancia, el interés del pueblo,
de todo el pueblo por los problemas económicos y por la marcha de todos sus
asuntos económicos, que es lo fundamental para el país, hace que todo el mundo
se sienta más obligado y más comprometido a dar de sí el máximo y hacer las cosas
con la mayor responsabilidad, con la mayor seriedad.
Este plan deberá ser divulgado ampliamente, porque hoy
simplemente hemos venido aquí a expresar que está el plan hecho, y que se envía
ya a todos los organismos. Ya está en
camino el plan hacia todas las unidades, y que el plan definitivo estará
confeccionado para el día 1ro de enero ya.
Sobre esto hay algunas cosas que son interesantes, pero
sobre estas cosas habrá que volver a hablar, es decir que no es posible de una
sola vez. Creo que por hoy, las cosas,
las líneas más importantes, basta.
Este plan tiende a la solución de una serie de
problemas. Está, por ejemplo, primero
que nada, el aumento de los bienes de consumo necesarios para el pueblo. Una de las metas. La creación de todos los empleos posibles,
del máximo de empleo posible para el
pueblo; los planes de educación, es decir, crear las condiciones que permitan
estudiar a toda la población escolar de nuestro país; las construcciones de
viviendas necesarias a satisfacer las necesidades de nuestro pueblo; los
servicios, por ejemplo, del transporte, que son tan importantes. Y, fundamentalmente, crear las bases de una
industria capaz de construir maquinarias
y de asegurar el desarrollo de nuestra economía.
Antes, el norte de toda la actividad de los hombres que
tenían que ver con la economía era la ganancia, la ganancia de ellos, no la
ganancia para el pueblo. Hoy el pueblo
tiene un objetivo. Para millones y
millones de nuestros compatriotas, para la inmensa mayoría de nuestros
compatriotas —que no eran dueños de fábricas, ni dueños de monopolios, ni
dueños de bancos, ni dueños
de edificios de apartamentos—, para millones de hombres y mujeres como ustedes,
¿qué era lo importante? ¿La ganancia de
los monopolios? ¿La ganancia de los
grandes latifundistas y de los dueños de apartamentos y de cientos de
casas? Lo importante para ustedes era el
trabajo, el empleo asegurado, la retribución justa del trabajo, los servicios
sociales, la educación de sus hijos, el provenir asegurado para los hijos de
ustedes.
En el servicio doméstico, ¿cuántas muchachas hay
trabajando? Decenas de miles. Era un empleo mal retribuido, humillante por
lo general. ¿Quién iba? Las hijas de
los obreros, de los campesinos, las hermanas. Nosotros sabemos casos de muchachas que
estaban en primero y segundo año de bachillerato y tuvieron que ir a trabajar
al servicio doméstico.
Al pueblo no le importaba la ganancia de los grandes
magnates de nuestra economía. Y a ellos
no les importaba para nada el pueblo; ellos eran los que planificaban, no
planificaban, organizaban la economía a su manera, a su imagen y semejanza,
siguiendo un solo norte, un solo interés.
A ellos no les importaba para nada lo del pueblo, el empleo para el
pueblo, la retribución para el pueblo, los servicio públicos, la educación, la
vivienda. Eso no les importaba.
Ustedes saben que, por ejemplo, el problema de la
vivienda, tal como estaba en Cuba, para determinados ingresos… Quien pudiera
pagar una casa de 100 pesos, de 90 pesos, tenía asegurada la casa; para ese
nivel que pudiera pagar altas rentas por la casa no había problemas. El problema tremendo empezaba con la gran
masa del pueblo que no podía pagar esos ingresos. Ya el que no podía pagar más de 20 ó 30
pesos, ya no encontraba casa de ninguna manera.
Aquellos no se preocupaban en absoluto por construir un edificio de
apartamentos baratos, de 20 pesos, del 10% que es la norma que se está
aplicando en las nuevas edificaciones.
Es decir que un obrero gana 200 pesos, y es el único
que está trabajando en su casa, paga 20; y si gana 150, paga 15 pesos, si la
familia lo que tiene de ingreso es 150.
Antes no se tenía en cuenta esa situación para nada; ganaba 150 y
necesitaba un apartamento, tenía que pagar 60, 80, no había alternativa para él; la alternativa de
irse para el solar, o para el barrio de indigentes. Inmediatamente buscaba unos cajones de
cartón, de madera, unos zines, y armaba el timbiriche allí. Aquello no tenía calle, no tenía nada
(APLAUSOS).
Miren, todavía hay muchos problemas sociales;
desgraciadamente todavía nuestra economía no tiene recursos para brindar una
ayuda mayor al pueblo. Ustedes tienen
todavía muchos casos, por ejemplo, el caso de la lavandera que tiene ocho hijos
y gana 30 pesos y vive en un solar. Bueno, se le busca una casa ¿y qué?, ¿ha
resuelto el problema? No, vamos a
suponer que le cobren tres pesos por la casa.
¿Y con qué le da comida a los ocho muchachos, con qué? Y hay decenas y decenas de miles todavía de
muchachos cuya economía familiar es tan pobre…
Escuelas:
actualmente 21 millones de pesos va a dedicar el país a las becas, y es
lógico, es correcto que haga eso, porque tenemos una urgente necesidad de
técnicos para todos los planes. Si
nosotros dedicáramos esos 21 millones de pesos a ayudar a esos muchachos que
están en 1er grado y dejáramos de invertirlo en becar a los jóvenes para ir a
las universidades, estaríamos cometiendo un error, estaríamos invirtiendo mal
los recursos.
Es por eso que nosotros hemos tratado de promover
algunos ensayos, como son las granjas infantiles, donde los muchachos ya son
capaces de producir. En el día de hoy yo
tuve la satisfacción de ver unas calabazas enormes, y las producen los
muchachos de la granja infantil de Cojímar (APLAUSOS). En dos caballerías y media de tierra que
estaban allí llenas de manigua, ya esos muchachos tienen 80 cerdos cebándose,
20 vacas que están produciendo como 200 litros de leche; están criando miles de
patos; tienen cabras, producen vegetales, plátanos, en fin, que unos muchachos estudiando —porque
tienen su escuela— tienen la producción para autoabastecerse en dos caballerías
y media de tierra que estaban abandonadas (APLAUSOS).
Nosotros queremos ver si logramos —porque hay
problemas que todavía es una pena que no se pueda hacer más— algún tipo de
centro de enseñanza para esos muchachos que no son desamparados propiamente, es
decir que no están en la calle, pero que son necesitados, que no les pueden dar
lo suficiente en su casa, algunos tipos de centros en que puedan hacer
determinados trabajos agrícolas, artesanales, de manera que puedan ayudar a
sostenerse, porque de esa manera podríamos ayudar a muchos más jovencitos que
actualmente sus condiciones de vida son duras.
Nuestra economía, desgraciadamente, no da para
más. La productividad del trabajo social
es baja todavía, porque muchas de nuestras fábricas son anticuadas, no hay
muchos técnicos; en muchos artículos de la agricultura todavía nuestra
producción es baja; la producción de maíz por caballería es baja todavía, hasta
que no se logren mejores variedades, para producir más con el mismo
trabajo. ¿Qué es el aumento de la
productividad del trabajo? Que con el
mismo trabajo con que hoy se cosechan 300 quintales, se cosechen luego 600
quintales, 700 quintales.
La productividad nuestra por la caña todavía es baja;
hay que lograr, a través de los centros de investigación agrícola, determinadas
variedades que logren, con la misma cantidad de trabajo, producir mayor
cantidad de azúcar, de riquezas. Y así
en todos los órdenes.
Hay que lograr, con la misma cantidad de trabajo,
hacer muchas más casas. Todavía nuestras
casas son caras, el costo es alto. Ahí
tenemos, por ejemplo, en las construcciones, 150 000 obreros, desde luego
que es un número que casi cuadruplica el máximo que había aquí. Ahora, esos mismos 150 000 obreros, con
nuevas técnicas de prefabricados, con nuevos procedimientos, pudieran construir
quizás el doble de casas el mismo número de obreros. Ese es el aumento de la productividad del
trabajo social.
Nuestro pueblo todo debe prepararse para producir más;
nuestra colectividad nacional tiene, por eso, que estudiar mucho, tiene que
enviar a sus hijos a la escuela, tienen que estudiar los jóvenes en las
universidades, en las escuelas tecnológicas, en los institutos tecnológicos, en
la enseñanza secundaria, para después ir a las universidades, en las escuelas
de agricultura, en las escuelas donde vamos a tener ya 50 000 becados el
próximo año (APLAUSOS).
Es decir que nuestra colectividad tiene que
prepararse, tiene que producir técnicos por regiones. Nuestra colectividad tiene que equiparse con
fábricas de las más modernas; nuestra colectividad tiene que investigar en la
agricultura y trabajar incansablemente para lograr aumento en la producción por
unidad. Es decir que ese volumen total
del producto bruto, crezca por año; que para el año 1963 la meta sea más alta,
que para el año 1964 sea más y más, que crezca en proporción mayor nuestro
producto bruto sobre el crecimiento de la población. Esa es la única realidad cierta.
Es decir que el aumento de nuestro producto bruto,
como consecuencia del aumento de la productividad del trabajo social, es lo
único que nos permitirá ir elevando por año el estándar de vida. Antes, el estándar de vida del pueblo no
contaba; los ingresos eran muy desiguales, y la mayor parte de las veces se
vivía en el engaño de más salario, pero más precio; más salario, más
precio. Los capitalistas, cuando los
obreros les arrancaban una concesión, un aumento, ellos a su vez aumentaban el
precio de los productos y se lo cobraban al pueblo otra vez.
No puede repartirse lo que no se produce. Si nosotros con el mismo esfuerzo en vez de 3 000
millones producimos 6 000 millones, podremos repartir e invertir 6 000
millones y no 3 000 millones (APLAUSOS).
Cuba puede contar —aspira a contar— para el año 1962,
con 3 216 millones 700 000 pesos para salarios, servicios, escuelas,
hospitales, jubilaciones, pensiones, lugares de recreo, fábricas, para invertir
y distribuir. Cuando tengamos 6 000
millones, podremos entonces invertir el doble, repartir el doble y prestar el
doble de servicios; quizás no el doble, porque la población ha aumentado, pero
el aumento logrado desde el 1958 hasta el 1962, según planes, según lo logrado
ya y lo que se propone el país aumentar es un crecimiento de la economía del
13% desde el 1958 hasta 1962 (APLAUSOS), 13% al año, por supuesto, en total el
65%.
Hay que tratar de mantener un índice de crecimiento
elevado. Si mantenemos el 13%, significa
que cada siete años y medio o cada ocho años, podremos duplicar nuestro
estándar de vida, cada ocho años.
Podemos duplicar nuestro estándar de vida, si mantenemos un ritmo de
crecimiento económico del 13%.
El crecimiento que se proponía en Punta del Este… se
proponía un desarrollo que permitiría un aumento por año del 2,5% del consumo o
del estándar de vida, 2,5%. Eso es la
famosísima Alianza para el Progreso de Mr. Kennedy (CHIFLIDOS Y EXCLAMACIONES
DE: “¡Fuera!”). Lo que les proponen a los pueblos de América
Latina, lo que propone el imperialismo —y desde luego, se lo propone no de
gratis, se lo propone ahora en vista de que Cuba existe como potencia
revolucionaria (APLAUSOS PROLONGADOS).
La situación en varios países de la América Latina es
de total estancamiento. En algunos
países incluso crecía más la población que lo que aumentaba su producción;
estaban estancados. Entonces ellos
proponen una alianza para el progreso, en virtud de la cual se asegure un
aumento de la capacidad de consumo o del consumo per cápita, de 2,5% al año,
para que no sigan el ejemplo de ese pueblo.
Entonces iban a prestar su dinero, claro, no para hacer un plan de
estos, sino, ellos hablaban de una planificación también para prestarles dinero
a los monopolios, a las industrias y a todos esos particulares; es decir,
inversiones que parte la iban a prestar ellos de la tesorería yanki, otras les
iban a hacer inversiones privadas, pero proponían un plan que permitiría un
aumento del consumo per cápita de 2,5 por año.
De acuerdo con ese plan, plan que además no se va a realizar, porque
todo eso es un cuento de camino, fíjense qué destino será el de la América
Latina, qué situación la de los obreros y campesinos de la América Latina, cuya
economía está estancada, cuya población crece, y cuya economía no crece. ¡Qué situación tan terrible es el destino que
espera a los pueblos de América Latina!
Claro, el imperialismo es el culpable de eso, el
imperialismo ha succionado las riquezas de esas naciones, les ha llevado el 10%
o el 15% del producto en bruto, es el que mantiene el régimen de salarios
miserables, mantiene las oligarquías explotadoras, las castas militares; porque
para mantener esa situación hace falta tener un ejército profesional
embrutecido y, entonces, el imperialismo, que es el culpable de todo eso, para
evitar el desarrollo de la revolución en la América Latina, se sale con un plan
que llama Alianza para el Progreso, en que propone un crecimiento que permite
el 2,5% al año —el aumento de la capacidad de consumo. Según eso, nosotros podemos —si eso se
cumpliera, que no se va a cumplir—, si se cumpliera, la situación es que
nosotros podemos hacer en ocho años lo que según ese plan requiere 25 años
(APLAUSOS).
Y esto es así, vamos a poner un ejemplo: si nosotros producimos 3 000, dentro de
siete años y medio, vamos a poner ocho, estaremos produciendo 6 000. Entonces, ellos, para producir 6 000,
necesitarían 25 años. Ahora, para
volverlo a duplicar, nosotros necesitaríamos ocho años más; podríamos tener 12 000
en 16 años. Entonces, ellos
necesitarían, para tener 6 000, 25 años; cuando nosotros tenemos, vamos a
suponer, 24 000, en esa proporción ellos tendrían 6 000. Porque claro que una economía, a medida que
crece, la proporción de crecimiento por año es mayor, el volumen total de lo
que crece por año. El 13%; el 13% de 100
es 13; el 13% de 1 000 es 130.
Así que esas son las perspectivas de nuestro país, y
eso es lo que nosotros hemos logrado:
estar en posesión de los recursos de la nación, de todos los medios de
la nación, para seguir una política nuestra, en servicio con un único
norte: ¿Qué es lo que le interesa aquí a
todos? Sencillamente: la nación, el pueblo. Entonces, el país traza su propia política
que le permite un futuro esplendoroso.
Eso no lo puede discutir nadie; los supersiquitrillados, que quieren a toda
costa, de a porque sí, que sea mala la Revolución, porque ellos se creían los
cerebros superprivilegiados sin los cuales el país fracasaba, y los hechos han
demostrado la falsedad de todo eso, ellos no pueden negar eso. Los imperialistas no pueden negar eso, no les
queda más remedio que tragarse esto (APLAUSOS).
Esto es de una elocuencia irrebatible. ¿Qué mejor prueba de que en Cuba haya menos
desempleados que nunca, a pesar de todo lo que nos han hecho a nosotros? Y que la situación para tantas familias sea
mucho mejor que cuando la danza aquella, la época de la guerra, que se vendía
el azúcar tan alto; habiéndonos quitado nuestra cuota, y habiéndonos bloqueado,
y habiendo saboteado las ventas, y haciendo todo lo que han hecho, vean las
ventajas de la economía socialista y de la economía planificada, la
distribución racional de los recursos; una política para el pueblo y no una
política a costa del pueblo.
La diferencia es tan grande, que a pesar de todo eso
hemos ido mejorando y podemos gastar 21 millones de pesos en becados. Eso es muy serio (APLAUSOS).
¿Qué significa cincuenta mil becados?
Pues significa que 50 000 familias van a disponer de un servicio
que si lo tuvieran que pagar les costaría 80 pesos, por lo menos
(APLAUSOS). Cincuenta mil familias
obreras van a poder mandar a sus hijos a la universidad y a las escuelas
tecnológicas. Eso es lo que significan
los 21 millones de pesos, los servicios que se les van a dar a tantas familias,
y sobre todo a tantos jóvenes, y los servicios que se le van a dar al país,
porque no solamente se está ayudando a un joven y a una familia, se está
ayudando a la nación, porque de ahí vendrán entonces los técnicos, educados con
una mentalidad nueva, que han recibido de la sociedad todos esos beneficios, y que
estarán, naturalmente, inclinados también a trabajar en el futuro, a aumentar
la productividad del país, para ayudar no a 50 000, sino a 100 000
jóvenes, porque en el futuro no serán 50 000, serán 100 000 (APLAUSOS).
Estas cifras son irrebatibles; estos hechos son
irrebatibles. Frente a estas verdades de
los obreros discutiendo y participando en la economía de su país, frente a esta
democracia real, verdadera y legítima, y no la mentira del politiquero
comprando votos, que es lo que ellos preconizan para mantener las oligarquías
corrompidas y las castas sanguinarias, saqueando como vampiros a los pueblos;
ellos no pueden oponer nada frente a esos hechos, sino sus planes agresivos,
sus planes de guerra, sus planes de invasión.
Porque si el sistema que ha traído la Revolución no
fuese el mejor, entonces ellos ¿por qué tendrían que preocuparse? No tendrían que preocuparse para nada. ¿Por qué organizar expediciones?, ¿por qué
entrenar mercenarios?, ¿por qué hacer planes?
¡Ah!, si su sistema es bueno —y nosotros decimos: su sistema es una basura completa
(APLAUSOS). Entonces, tienen que
mantener al mundo bajo la amenaza de una guerra; los barcos yankis circulando
por todos los mares del mundo; amenazando con sus cañones a los vietnameses en
Asia, a los congoleses, a los africanos en Africa, a los latinoamericanos en
América Latina, en Manila, en Indochina, en la "Cochinchina", en el
Caribe, en Puerto Rico (APLAUSOS), en España, en Turquía, en Nicaragua, en
Guatemala, en todas partes tienen que estar amenazando con sus cañones, para
mantener su régimen de piratería, de filibusterismo y de saqueo.
Para ellos el mundo es como el oeste antiguo para los
pistoleros, aquellos pistoleros a cuyos revólveres no se les acababan nunca las
balas (RISAS Y APLAUSOS). El imperialismo
yanki pretende ahora hacer al mismo tiempo el papel de bandido y de sheriff en
todo el mundo, y por eso andan sus barcos amenazando con sus cañones, esos
barquitos que los vemos por aquí dando vueltas, porque a la isla de Cuba la
tienen siempre dándole vueltas con sus barcos, sus aviones y todo eso. ¡Van a dar tantas vueltas que se van a
marear! (APLAUSOS.)
Pero es lo mismo que hacen en cualquier otro lugar del
mundo: andan de gánsters por el mundo,
metiendo miedo, amenazando con guerras, porque ellos no tienen razones, no
tienen filosofía, no tienen ningún arma moral con que defender su sistema de
bandolerismo y de pillaje. Y los hechos
son más elocuentes que las razones todavía.
Por eso ellos no nos quieren dejar en paz a nosotros, no nos quieren
dejar trabajar. Ellos lo que quieren es
que aquí haya algo parecido a lo de Santo Domingo, a lo de Nicaragua, a lo de
Guatemala, a lo que había aquí, porque es el sistema que les viene bien a
ellos: cuatro bandoleros, ladrones,
saqueadores, con 60 000 esbirros, asesinando y torturando gente, para
mantener los intereses de los monopolios, de los grandes explotadores.
Nuestro pueblo se ha librado de todo eso, marcha por
senderos de progreso, marcha por senderos de bienestar, vence los obstáculos, y
se prepara para construir un futuro que ya todo el pueblo empieza a comprender
que será un gran futuro; mientras ellos hacen lo posible por obstaculizarnos en
nuestro camino. Por eso mismo, porque
ellos no pueden soportar estas verdades, porque ellos no pueden soportar estos
hechos, porque ellos no pueden soportar estos ejemplos.
De ahí la saña con que luchan por destruir la
Revolución y practican los peores actos de vandalismo, que van desde aquellos
incendios hasta las expediciones, hasta los asesinatos, como el bárbaro
asesinato perpetrado en la base de Caimanera contra un obrero cubano
(EXCLAMACIONES Y APLAUSOS). Es
verdaderamente espeluznante el relato de la forma cruel con que a ese obrero lo
detuvieron, engañaron a los familiares, a su esposa, a cuyo cargo han quedado
numerosos hijos, y cómo lo desaparecieron, y al igual que hacían aquí los
esbirros, los Ventura y su comparsa, allí también lo arrestaron, lo asesinaron
a base de torturas, lo enterraron y después apareció un cadáver más, como
aparecían aquí.
¿Qué dirán de eso?, ¿qué explicación le darán ahora al
mundo de ese hecho bárbaro, criminal y cobarde, bajo e inhumano? Así han privado a un hogar más: es un crimen más del imperialismo, porque su
función en el mundo es matar, asesinar, agredir, violar derechos humanos,
violar soberanías de los pueblos.
Nosotros proponemos que aunque sea con la contribución
modesta, aunque fuese con la contribución de un centavo por trabajador cubano,
nosotros le construyamos una casa a la esposa de ese obrero asesinado (APLAUSOS
PROLONGADOS), que el gobierno revolucionario le conceda una pensión a la esposa
y les conceda becas a los niños para estudiar (APLAUSOS).
Así los imperialistas cada día se ganan más el odio
del mundo, el odio de los pueblos; cada vez se llenan más de descrédito y de
repulsa universal. Ya pasaron los
tiempos en que ellos campeaban por su respeto, afortunadamente; ya tienen que
medir un poquitico más sus pasos. Los bandidos
imperialistas se encuentran ante realidades demasiado poderosas y demasiado
serias, y tienen que andar con cuidado, con más cuidado del que andaban antes,
cuando mandaban a sus barquitos con los marines a desembarcar en cualquier
parte del mundo.
Todos esos hechos son la consecuencia de su impotencia
y de su odio frente a la Revolución. La
Revolución, que ha tenido que hacer grandes esfuerzos en todos los campos, que
ha tenido que sacrificar vidas valiosas para defender la soberanía del país,
tiene que hacer útil ese esfuerzo.
Nosotros estamos luchando por algo. Cuando ha caído algún compañero, ha caído
defendiendo esto precisamente: la
Revolución y todas las obras de la Revolución para el pueblo, las escuelas, los
planes, las fábricas, las riquezas, el porvenir de la nación.
Se lucha por eso.
De ahí la importancia del trabajo, del trabajo serio y responsable; la
importancia del sentido de la responsabilidad, del cumplimiento del deber de
todos y cada uno de nosotros, de cada compañero, sea cual sea el nivel donde
desempeñe sus funciones: en la alta
dirigencia, o en una célula, o en un núcleo de una fábrica: el deber de cada ciudadano, de cada
funcionario, de cada administrador de empresa, o de granja, o de cooperativa,
de cada presidente de asociación campesina, de cada miembro de los consejos
asesores, de cada miembro de la dirección obrera de los sindicatos, que ahora
se están reestructurando y reorganizando con un extraordinario vigor.
He ahí la tarea de todos, la responsabilidad que todos
tenemos de hacer trabajos serios y con métodos no burocráticos, sino con
métodos populares, con métodos revolucionarios, con métodos democráticos, para
evitar incurrir en los errores; el deber que tenemos todos de cumplir con
nuestra tarea y cumplirla con seriedad, de que la confianza que se deposite en
cualquiera de nosotros no debe ser defraudada nunca.
Porque estos son los frutos de la Revolución, estos
son los frutos que nosotros tenemos derecho a recoger, por los cuales hemos
luchado, por los cuales han muerto tantos obreros y tantos combatientes, por
los cuales se luchó en los campos de batalla de la Ciénaga, por los cuales se
luchó en la guerra, por los cuales se lucha constantemente, por los cuales está
el pueblo dispuesto a hacer los mayores sacrificios, por los cuales se entrenan
nuestras unidades de combate, por los cuales se prepara el pueblo; para
defender ese derecho, para defender ese programa, para defender ese porvenir.
Y el sacrificio que han hecho los caídos, debemos
complementarIo en la producción, en el otro campo de batalla, en el campo de
batalla de la producción, donde tenemos tantas posibilidades, en este país
rico, de pueblo inteligente y entusiasta, de recursos abundantes y vastos, en
esta tierra rica y pródiga, donde el pueblo es hoy dueño de su destino, dueño
de hacer su destino; explotar como suyas las riquezas de la patria, para tener
todo lo que necesita, y todo lo que necesitan los niños y los ancianos, y para
tener incluso más de lo que necesitamos, y que solo depende de nuestro
esfuerzo, que solo depende de nuestro trabajo; ¡para así saber aprovechar los frutos
que han conquistado con su heroísmo y con su sangre los que han caído por la
Revolución!
Patria o Muerte!
¡Venceremos!
(OVACION)