DISCURSO PRONUNCIADO POR EL
COMANDANTE FIDEL CASTRO RUZ, PRIMER SECRETARIO DEL COMITE CENTRAL DEL PARTIDO
COMUNISTA DE CUBA y PRIMER
MINISTRO DEL GOBIERNO REVOLUCIONARIO, EN LA POBLACION DE LABE, REPUBLICA DE
GUINEA, EL 5 DE MAYO DE 1972.
(DEPARTAMENTO DE VERSIONES TAQUIGRAFICAS
DEL GOBIERNO REVOLUCIONARIO)
Camarada y
hermano Sekou Touré
(APLAUSOS);
Camaradas del
Partido de Labé;
Hermanos de Labé
(APLAUSOS):
Hace tres días llegamos a su país. En este tiempo hemos recorrido distintas
regiones de Guinea. Y hoy, en un día
hermoso, hemos llegado por fin a Labé (APLAUSOS).
En todas partes hemos visto el mismo espíritu de
solidaridad y amistad a nuestro país (APLAUSOS). En todas partes el mismo calor, en todas
partes el mismo pueblo, el mismo espíritu, el mismo entusiasmo, la misma
fuerza; en todas partes la misma confianza en el Partido, y en todas partes el
extraordinario cariño y la extraordinaria confianza en el presidente Sekou Touré (APLAUSOS). En todas partes hemos visto los frutos de la
obra de 25 años de lucha, y la hemos visto en el pueblo.
El presidente Sekou Touré decía que no era fácil hacer una revolución
(APLAUSOS). Y eso es cierto. No es fácil educar a un pueblo, no es fácil
organizar a un pueblo, porque no es fácil vencer al imperialismo, vencer al
colonialismo, conquistar la independencia, vencer el atraso técnico, vencer el
analfabetismo, vencer la pobreza. No es
fácil, sobre todo cuando se parte de muy poca cosa, de muy pocos recursos, de
muy pocas armas, de muy poca fuerza.
Pero sin embargo, con una idea justa, con un pensamiento correcto, con
un amor grande hacia el pueblo, con un sentimiento noble... De esas ideas, de esos sentimientos, partió
el movimiento en Guinea; y de las tradiciones del pueblo, de las glorias del
país, del heroísmo del país, el país que luchó decenas de años contra la
conquista, el país de Alpha Yaya y de Samory Touré (APLAUSOS).
Y sin embargo, he aquí un pueblo plenamente
independiente, un pueblo lleno de conciencia y de cultura política, un pueblo
unido, un pueblo organizado, un pueblo movilizado, un pueblo armado, un pueblo
en marcha, un pueblo avanzando. ¡Esa es
la obra del Partido y de Sekou Touré,
identificado con su pueblo!
(APLAUSOS
Por eso nosotros tenemos que sentir una gran
admiración, una gran simpatía y un gran reconocimiento. Esa solidaridad hacia los demás pueblos,
hacia nuestro país distante, la pequeña Isla próxima a Estados Unidos.
Eso de escuchar aquí el nombre de la patria cubana en
los labios de los niños de los primeros grados, esa es la cultura política
(APLAUSOS), esa es la conciencia revolucionaria, esa es la educación de las
masas.
Y qué mundo tan diferente: hace 20 años, hace 15 años, ¿qué niño
cubano sabía de revolución, qué niño cubano sabía de Guinea o sabía de Viet Nam? ¿Hace 15 años qué niño guineano sabía de la
revolución, qué niño guineano sabía de Cuba?
Pero algo más:
¿qué niños guineanos y qué niños cubanos tenían maestros, qué
niños guineanos o qué niños cubanos tenían escuela? Qué nos decía el Ministro delegado: que antes de la
independencia había una escuela de nivel medio, y ahora hay 67 escuelas de
nivel medio en esta región. Antes de la
independencia había 25 escuelas en esta región, es decir, en la Guinea Media, y
ahora hay 500. ¿Y qué se enseñaba en
aquellas escuelas? Las ideas y las
doctrinas del colonialismo, la despersonalización —como ha dicho tantas veces
el camarada Sekou Touré
(APLAUSOS), los valores culturales de otras sociedades que no tienen nada que
ver con nuestros países, la humillación, la resignación.
¿Y qué se enseña ahora en las escuelas de la
revolución? La verdadera fraternidad, la
verdadera solidaridad, las ideas revolucionarias, los valores más legítimos, la
cultura de nuestros pueblos, su dignidad, su grandeza. Se enseña esto que hemos visto aquí, se
enseña el patriotismo, el internacionalismo, la justicia, la técnica, la
confianza del pueblo en sí mismo, las ideas revolucionarias, el futuro.
Por eso, cualesquiera que hayan sido los éxitos
materiales, y son importantes: importantes
son las industrias, los caminos; importante es esa hidroeléctrica construida en
Kinkon, importantes las industrias que se
desarrollan en Tombé, la fábrica de conservas, la
fábrica de perfumes, la fábrica de cemento...
Esa industria tiene mucha importancia, y ustedes lo comprenderán cuando
vean todo lo que pueden construir cuando tengan 100 000 y 200 000 toneladas de cemento
invertidas en industrias, en puentes, en caminos, en hospitales, en escuelas, en
viviendas.
Todo eso es muy importante, y hay que seguir
trabajando para vencer la naturaleza, para vencer la pobreza, para tener más
fuerza, para tener más recursos con qué ayudar al propio pueblo y con qué
ayudar a otros pueblos si lo necesitan.
Pero por encima de todas las riquezas materiales, nos impresiona la obra
de la revolución en el pueblo (APLAUSOS), la obra cultural y humana que la
revolución ha llevado a cabo en el pueblo de Guinea. Nos impresiona la fuerza del pueblo, su
unidad, su combatividad. Y eso es muy
importante, porque la lucha no ha concluido para nuestros pueblos. No ha concluido la lucha para el pueblo de
Cuba, incesantemente amenazado por el imperialismo; no ha concluido la lucha de Viet Nam; no ha
concluido la lucha en Guinea; no ha
concluido la lucha en América Latina, en Asia y en Africa; todavía hay pueblos
totalmente sometidos al coloniaje o al colonialismo en los tres
continentes.
Todavía existen grandes injusticias, todavía existe la
discriminación racial y todavía existe la explotación. Existen todavía muchas injusticias que
derrotar en este mundo. y nuestros pueblos tienen que estar
preparados, y nuestros pueblos tienen que estar unidos en esa lucha. ¡No olvidarse del 22 de noviembre! Es increíble, inconcebible, que semejante
crimen se haya cometido.
¿Por qué razón, con qué derecho, sin declaración
previa, sorpresivamente, los mercenarios imperialistas atacan la capital de
Guinea? (APLAUSOS) Si alguien hubiera atacado a Lisboa, si
alguien hubiera atacado a Washington, Nueva York, Roma, Londres, habría habido
un escándalo enorme en el mundo, habría parecido una cosa insólita,
terrible. Y nos preguntamos: ¿con qué derecho
entonces atacar la capital de Guinea?
¿Con qué derecho desembarcar en la madrugada, y bombardear la casa del
presidente para asesinarlo; atacar el palacio
Presidencial, atacar las industrias, atacar los cuarteles? ¿Con qué derecho?
Y lo mismo hicieron con nosotros, y lo mismo hicieron
con otros países: con
mercenarios, con soldados regulares disfrazados, con aviones que llevaban la
insignia de nuestro país.
Esos son los crímenes y las fechorías de los
imperialistas. Pero nos dan una
lección: ¡Que tenemos que mantener la
guardia en alto!, que tenemos que estar preparados, que tenemos que estar
armados, que tenemos que estar fuertes, que tenemos que estar unidos en una
lucha incansable hasta la victoria final frente a los imperialistas
(APLAUSOS).
Nuestros pueblos estarán unidos, y Guinea podrá contar
con Cuba, igual que Cuba cuenta con Guinea (APLAUSOS). Y si los imperialistas pretenden cometer esos
crímenes contra el pueblo de Guinea, ¡junto al pueblo de Guinea estará nuestro
pueblo, junto a las armas del pueblo de Guinea estarán también nuestras armas,
y si es necesario junto a los combatientes del pueblo de Guinea estarán también
nuestros combatientes! (APLAUSOS)
Es necesario que los imperialistas lo sepan y los
imperialistas lo conozcan, que nuestros pueblos no están solos, y que nuestros
pueblos unidos son fuertes, y son fuertes sobre todo no por nuestra riqueza
—que está por desarrollar—, somos fuertes por nuestras ideas, por la justicia
de nuestra causa, por nuestro espíritu revolucionario y por nuestra
dignidad. Y por eso estamos seguros de
la victoria, estamos seguros de que nada ni nadie podrá
derrotar a nuestros pueblos.
¡Viva la amistad de los pueblos revolucionarios! (EXCLAMACIONES DE: "¡Viva!")
¡Viva el pueblo de Guinea! (EXCLAMACIONES DE: "¡Viva!")
¡Viva la revolución de Guinea! (EXCLAMACIONES DE: "¡Viva!")
¡Viva el presidente Sekou Touré! (EXCLAMACIONES
DE: "¡Viva!")
¡El imperialismo!
(EXCLAMACIONES DE:
"¡Abas!")
¡El colonialismo!
(EXCLAMACIONES DE:
"¡Abas!")
¡El neocolonialismo!
(EXCLAMACIONES DE:
"¡Abas!")
¡La explotación!
(EXCLAMACIONES DE:
"¡Abas!")
¡La injusticia!
(EXCLAMACIONES DE:
"¡Abas!")
iLa discriminación! (EXCLAMACIONES DE: "¡Abas!")
¡Gloria!
(EXCLAMACIONES DE:
"¡Au peuple!")
¡Victoria!
(EXCLAMACIONES DE:
"¡Au peuple!")
¡Honor!
(EXCLAMACIONES DE:
"¡Au peuple!")
¡Patria o Muerte!
¡Venceremos!
(OVACION)