Discurso pronunciado por el General de Ejército Raúl
Castro Ruz, Presidente de los Consejos de Estado y de
Ministros, en el acto central en conmemoración del 56 aniversario del asalto a
los cuarteles Moncada y Carlos Manuel de Céspedes, en la plaza Mayor General
"Calixto García", Holguín, 26 de julio de 2009, "Año del 50
aniversario del triunfo de la Revolución"
Combatientes del 26 de julio de 1953 (Aplausos), del
Ejército Rebelde, la lucha clandestina y las gloriosas misiones
internacionalistas (Aplausos);
Familiares de los caídos;
Holguineras y holguineros (Aplausos);
compatriotas:
Pudiéramos empezar haciendo una pregunta por pura
curiosidad personal. Ustedes saben que yo soy de aquí (Aplausos y
exclamaciones), y por lo tanto tengo el derecho de curiosear en el sentido de
saber, si es posible, a qué comprovinciano se le ocurrió ponernos el sol aquí
detrás (Risas), que a mí no me molesta, pero estoy seguro de que ninguno de
ustedes me puede ver; verán, si acaso, una sombra: ese soy yo (Aplausos).
Por tales motivos, en esta conmemoración del 56
aniversario del asalto a los cuarteles Moncada y Carlos Manuel de Céspedes mi
intervención será muy breve, atendiendo a las altas temperaturas que han
caracterizado nuestro verano en este año, aunque comenzamos más temprano que lo
habitual —a las 7:00 horas—, y sabiendo que desde las seis de la mañana ya se
encontraban aquí todos ustedes, que la mayoría vino a pie desde sus respectivas
viviendas (Aplausos), y que anoche, como pude ver brevemente por la televisión,
estuvieron justamente celebrando este aniversario. Y, además, el sol ese que no
se sabe quién se lo puso frente a ustedes.
Por tales motivos seré breve, repito, y en los
próximos días, muy próximos, tendremos importantes reuniones que servirán de
escenarios más propicios para extenderse a fondo en cuestiones complejas.
La primera será del Consejo de Ministros, pasado mañana,
dedicada a analizar el segundo ajuste de los gastos previstos en el plan de
este año, a causa de los efectos de la crisis económica mundial en nuestra
economía, en particular la reducción significativa de los ingresos provenientes
de las exportaciones y las restricciones adicionales para acceder a fuentes de
financiamiento externo.
Como ustedes conocen, durante 11 días estuve
recorriendo varios países del África amiga y participar, como presidente, hasta
muy recientemente, del Movimiento de Países No Alineados y hacerle entrega de
esa responsabilidad al Presidente de Egipto.
El tiempo de que dispongo es muy poco y apretado por
estas reuniones e importantes temas que les estoy informando.
Al día siguiente de ese Consejo de Ministros, el
29 de julio, celebraremos el séptimo Pleno del Comité Central del Partido,
en el cual, durante un día entero, según el programa y la agenda u orden del
día a discutir, profundizaremos en asuntos vitales relacionados con la
situación nacional e internacional.
Y, además, por último, el 1º de agosto está convocada
la sesión ordinaria de la Asamblea Nacional del Poder Popular, ocasión en la
que, entre otras cuestiones, será sometido a debate el proyecto de Ley de la
Contraloría General de la República, órgano que contribuirá a elevar la
exigencia en el cumplimiento de la legislación vigente y en materia de control
por todas las estructuras de dirección del país.
PREMIO AL ESFUERZO Y AL TRABAJO REALIZADO
Este año la selección de la sede del acto central por
el 26 de Julio no se ajustó estrictamente a los indicadores establecidos.
Hubiera sido ilógico partir solo del grado de cumplimiento de esos índices,
cuando desde septiembre, tras el paso devastador de los huracanes, resultó
evidente que en gran parte del país, sencillamente era imposible alcanzarlos.
No olviden, como en su oportunidad informamos en
nuestro Parlamento, que los destrozos, sin que quiera decir que estén
perfectamente todos compatibilizados o contabilizados, alcanzaron la cifra de
alrededor de 10 000 millones de dólares, el equivalente al 20% del
Producto Interno Bruto, o sea, el valor de todo lo que hicimos en materia de
trabajo y producción durante ese año pasado.
Por tales motivos el Buró Político, al determinar que
Holguín fuera la sede y otorgar la condición de destacadas a Villa Clara, Granma y Ciudad de La Habana, puso en la balanza lo logrado
en los primeros meses del año, en circunstancias más o menos normales, y sobre
todo el esfuerzo de las provincias, primero para enfrentar los fenómenos
meteorológicos con las menores pérdidas de vidas humanas y recursos materiales,
y particularmente en las labores de recuperación.
En ello a Holguín le ha correspondido una gran
responsabilidad. Es una provincia extensa, con más de un millón de habitantes y
una incidencia apreciable en la economía nacional por la industria del níquel,
el tercer polo turístico del país y otras importantes producciones. Es un
premio al esfuerzo y al trabajo realizado.
Por tanto, felicitamos a las holguineras
y holguineros (Aplausos); al compañero Miguel Díaz-Canel Bermúdez (Aplausos), primer secretario del Partido en
la provincia en ese momento difícil y en los años previos, que también fueron
de intenso trabajo. Hacemos extensiva esta felicitación al compañero Jorge
Cuevas Ramos (Aplausos), procedente de Las Tunas, provincia también golpeada
fuertemente por el huracán Ike y que desde su
elección al frente del Partido en Holguín ha desplegado una entusiasta y activa
labor.
Felicitamos igualmente a las provincias destacadas,
sin dejar de reconocer el esfuerzo realizado por todas, a los compatriotas de
Pinar del Río y la Isla de la Juventud (Aplausos), en el occidente, que
afrontaron daños sumamente severos, así como a camagüeyanos y tuneros, en
particular a los habitantes de Santa Cruz del Sur y Guayabal, poblados con
afectaciones considerables, que en algunos casos, casi les ocasionaron la
destrucción total (Aplausos).
UN PUEBLO EDUCADO EN LA GENUINA SOLIDARIDAD
Solo he mencionado algunos de los lugares que
sufrieron los mayores destrozos. Realmente han sido meses difíciles y de arduo
trabajo de un extremo a otro de la nación. En todo el país se ha puesto de
manifiesto la capacidad de resistencia, organización y solidaridad de nuestro
pueblo. Crecen los ejemplos de cómo debe trabajarse en estos tiempos.
Esa fue la conducta asumida por la inmensa mayoría de
los compatriotas de esta provincia durante el paso del huracán Ike y en los meses posteriores. Así sucedió en todas
partes.
Muchos compañeros han permanecido movilizados lejos de
sus familias, incluso cuando no pocas de ellas también sufrían serias
limitaciones, con frecuencia albergadas por haber perdido total o parcialmente
sus viviendas.
Confiaron en la Revolución y cumplieron la tarea asignada, conscientes de su importancia y seguros
de que sus seres queridos no quedarían en el desamparo.
Igualmente dice mucho de la calidad humana de nuestro
pueblo, la masiva disposición de acoger en sus hogares a vecinos cuyas casas no
ofrecían suficiente seguridad, actitud que se ha hecho cotidiana ante
adversidades de diverso tipo.
En esos valores está educado nuestro pueblo, en la
genuina solidaridad, comparte lo que tiene con sus hermanos, sean cubanos o de
otras tierras, no lo que le sobra, que aquí no sobra nada, generalmente sólo
problemas (Aplausos).
En esa misma medida el pueblo cubano agradece la
ayuda, los gestos de generosidad y el apoyo recibidos desde múltiples rincones
del planeta. Hago propicia la ocasión para reconocer la noble y digna labor de
la fundación interreligiosa Pastores por la Paz (Aplausos), a su líder, el
Reverendo Lucius Walker
(Aplausos) y a los integrantes de la XX Caravana de la Amistad Estados
Unidos-Cuba (Aplausos), así como a la Brigada Venceremos que arribó a su 40
aniversario, una representación de las cuales nos acompaña en este acto
(Aplausos).
LOS DAÑOS A LAS VIVIENDAS SON UN ASUNTO MUY SERIO
Los daños a las viviendas son un asunto muy serio.
Solo en esta provincia de Holguín resultaron afectadas casi 125 mil, de las
cuales se han recuperado alrededor de la mitad.
A nivel nacional, si se agrega a las dañadas por
estos tres ciclones, las pendientes de solución de años anteriores, sobre todo
de principios del siglo por similares motivos de huracanes, sumaban a finales
del 2008 más de 600 mil, por eso alerté en su momento que se requeriría tiempo
para cambiar radicalmente esa situación.
Se ha hecho en realidad un esfuerzo digno de
reconocimiento por entidades, colectivos laborales y los propios vecinos. Es
significativo que hasta el 20 de julio estuviera solucionado el 43% de las
afectaciones, o sea, más de 260 mil viviendas.
No obstante, resta muchísimo trabajo por hacer y
además es necesario evitar que vuelvan a acumularse en el futuro esas enormes
cifras, teniendo en cuenta que a consecuencia del cambio climático, se
pronostica por muchos científicos que los huracanes podrían ser de mayor
intensidad y con mucha más frecuencia.
ESTAR EN CONDICIONES DE PREVENIR Y ENFRENTAR LA
SEQUÍA
Igualmente se trabaja para estar en condiciones de
prevenir y enfrentar los efectos de los recurrentes períodos de sequía, cada
vez más prolongados e intensos, mediante diversas medidas, entre ellas el
trasvase de agua, incluso de unas provincias a otras.
Recuerden los tres años difíciles de sequía desde
comienzos del siglo hasta el 2005, donde fue necesario en todo el país
llevarles el agua hasta en ferrocarriles y en todo tipo de vehículos y vasijas
a cerca de 3 millones y medio de cubanos (Aplausos).
Por eso estamos construyendo en diferentes lugares
estos trasvases de agua estratégicos, que nos permitirán maniobrar con el
líquido vital de unas provincias a otras.
Como se conoce, esta monumental obra comenzó aquí en
Holguín, donde se presenta la paradoja de colindar la región en que más llueve en
la isla —por allá en los límites de Baracoa,
provincia de Guantánamo— con una de las más secas, lo que hace pocos años puso
en peligro el abasto de agua a esta poblada urbe.
En los próximos días —lo íbamos a hacer hoy una vez
concluido este acto, pero por los motivos anteriormente expuestos, al inicio de
mis palabras, lo haremos en el transcurso del mes de agosto, más adelante—,
dejaremos formalmente inaugurada la primera etapa del trasvase Este-Oeste
(Aplausos), que comprende la conductora de la presa Nipe
—allá por el río del mismo nombre, en el municipio de Mayarí—
a la presa Gibara —no cerca de la ciudad de Gibara, más al norte, sino una que está aquí, más próxima a
la ciudad de Holguín, al este de la misma.
O sea, presa Nipe a Gibara, desde allí, aguas abajo, por el río creo que del
mismo nombre, al embalse Colorado, que está más al norte, y de este embalse
Colorado vuelve para atrás, pero por el norte, mediante otra conductora ya
construida, hasta la presa El Naranjo, de unos 11 ó 12 millones de metros
cúbicos de capacidad y que muchas veces está seca, y que abastece esa zona y al
polo turístico de Guardalavaca, en el cual en
aquellos años de sequía fue necesario cerrar también algunos hoteles.
Esta costosa obra —y es solo el comienzo—, ya
concluida y en uso, asegura el suministro estable de agua a la región norte de
Holguín, incluida su capital.
La continuación del proyecto, que se encuentra en
fase avanzada, incluye la construcción de la presa llamada Melones, que para
ser más exacto, propongo denominarla Mayarí, por el
río que la alimenta (Aplausos), cuya cortina —única en su tipo construida en
Cuba con esa tecnología— terminará de cerrarse en abril de 2011, aunque
comenzará a almacenar agua desde el próximo año 2010.
La presa Nipe, con
alrededor de 130 millones de metros cúbicos, llevaba 25 años de construida sin
darle valor de uso.
En ocasión de la inauguración mencionada, este propio
mes, de la primera etapa, de la que ya les hablé, o sea, del trasvase
Este-Oeste, la televisión transmitirá un amplio reportaje acerca de esta obra
de gran magnitud y suma relevancia, el que además explica todo el sistema de
trasvases de agua entre provincias en ejecución.
Es un programa para el presente y sobre todo para el
futuro, cuando el agua será cada vez un recurso más escaso, sobre todo en una
isla larga y estrecha como la nuestra, donde el preciado líquido se pierde en
rápidos vertimientos al mar.
Solo he mencionado una etapa de este programa, que
abarca gran parte del país, desde Sancti Spíritus, en el centro de la isla, hasta Guantánamo. En
esta última provincia, en el primer semestre del próximo año, concretamente el
fértil valle de Caujerí, comenzará a recibir agua por
gravedad a través de túneles que atraviesan las montañas —en este caso
construidos por las fuerzas armadas—, lo que supone un considerable ahorro de
combustible, al suprimirse su costoso bombeo.
También se trabaja en la rehabilitación de las redes
de acueducto y alcantarillado de esta provincia, entre ellas las de los
municipios de Cacocum, Urbano Noris
y acciones puntuales en Frank País, Gibara y Banes. En la ciudad de
Holguín se han ejecutado 114 kilómetros de redes, con 21 620 acometidas, hacia
las casas, y una población beneficiada de 86 400 habitantes.
Con la llegada de nuevos equipos en los próximos
meses, se incrementará el ritmo de estas obras en Holguín, donde ya existe una
de las tres fábricas que produce las tuberías necesarias de diferentes tamaños.
Como se conoce, se encuentra en ejecución además una costosa inversión que solucionará
definitivamente el abasto de agua a la ciudad de Santiago de Cuba, la cual
concluirá en el 2010. Y en el año 2011 se prevé terminar los acueductos de El
Cristo y El Cobre en dicho municipio santiaguero, y se encuentra en proceso de
estudio el de Palma Soriano.
VOLVERNOS HACIA LA TIERRA, HACERLA PRODUCIR MÁS
Pasando a otro tema, de los pocos que pienso tocar en
la mañana de hoy, el 26 de julio del 2007, en Camagüey, me referí a la
imperiosa necesidad de volvernos hacia la tierra, hacerla producir más.
Entonces casi la mitad del área cultivable estaba ociosa o deficientemente
explotada. Llamamos en ese momento a generalizar con la mayor celeridad posible
y sin improvisaciones cada experiencia de los productores destacados del sector
estatal y campesino, y estimular la dura labor que realizan, así como
solucionar definitivamente los dañinos impagos por el Estado en el sector.
Avanza a ritmo satisfactorio la entrega de tierras en
usufructo, aunque persisten insuficiencias, en unos municipios más que en otros.
De las más de 110 mil solicitudes realizadas, se han aprobado hasta el momento
cerca de 82 mil, que abarcan unas 690 mil hectáreas, o sea, el 39 por ciento
del área ociosa.
Considero que es poco, no es cuestión ahora de salir
corriendo a repartir sin control, es hacerlo más eficientemente, es hacerlo
organizadamente, y que es una tarea de primera prioridad estratégica. Ya uno de
los oradores que me antecedió en el uso de la palabra se refería a que es un
tema de seguridad nacional producir los productos que se dan en este país y que
nos gastamos cientos y miles de millones de dólares —y no exagero— trayéndolos
de otros países.
¡La tierra está ahí, aquí están los cubanos, veremos
si trabajamos o no, si producimos o no, si cumplimos nuestra palabra o no! No
es cuestión de gritar Patria o Muerte, abajo el imperialismo (Aplausos), el
bloqueo nos golpea y la tierra ahí, esperando por nuestro sudor. A pesar de que
los calores son cada vez mayores, no queda más remedio que hacerla producir.
Creo que estamos de acuerdo (Exclamaciones de: "¡Sí!" y aplausos).
Volando, sobre todo en helicóptero, a lo largo y
ancho del país, a veces ordeno al piloto desviarse y darle una vuelta a
cualquier poblado, ciudad, etcétera. Puedo asegurarles que en la mayoría de
todos sobra tierra y de buena calidad, pegada a nuestros patios, que no se
cultiva; y por ahí es por donde se está haciendo un plan para avanzar, con
cultivos intensivos, poniéndoles riego donde sea posible que exista agua y que
existan los recursos para ponerlo. Si un día faltara el combustible en este
mundo tan cambiante y alocado, que la comida la tengamos cerca, que la podamos
traer en un carretón con caballos, con un buey o empujándola por nosotros
mismos (Aplausos).
De la tierra ya entregada se ha declarado libre de
marabú y otras plantas indeseables cerca de la mitad y se han sembrado casi 225
mil hectáreas, es decir, la tercera parte.
No podemos sentirnos tranquilos mientras exista una
sola hectárea de tierra sin un empleo útil y alguien dispuesto a hacerla
producir esperando por respuesta.
Tierra que no sirva para producir alimentos, debe
servir para sembrar árboles que es, además, una gran riqueza. Y quien les habla
ha experimentado durante muchos años, y sobre todo en los últimos años,
sembrando pequeños bosques, y he tenido el placer y la satisfacción de verlos
crecer, y según el tipo de árbol, a veces en cinco años ya he formado un
pequeño bosque con varios cientos de diferentes tipos; pero cada vez que
hablamos del tema se aparecen los funcionarios del Ministerio de la Agricultura
—del actual y de todos los demás anteriores ministros de Agricultura— con un
listado interminable de millones de pesos o divisas solicitados para la tarea
que se asigna, y si no aparece una bolsita de nailon no se puede sembrar. Yo no
sé con qué diablo nuestros abuelos sembraban árboles (Risas y aplausos), y por
ahí están, y estamos nosotros comiéndonos los mangos que sembraron ellos
(Aplausos).
No educamos a un niño en el amor a los árboles y que
siembren algunos —donde haya tierra, por supuesto— en el transcurso de su
tránsito por la primaria, secundaria, preuniversitario. Me están oyendo aquí
algunos dirigentes de la juventud; pero sembrar árboles pueden hacerlo jóvenes
de la tercera edad, como yo, es decir que no es solo una tarea de la juventud
(Aplausos).
Son estimulantes los resultados en el acopio de
leche, que ha crecido en los últimos dos años en más de 100 millones de litros
anualmente, pues de 272 millones en el 2006, se alcanzaron 403 en el 2008, y
este año todo indica que el incremento será superior. De este tema hablé en el
2007 en Camagüey, un día como hoy.
He abordado muy someramente dos aspectos del decisivo
tema de la producción de alimentos, que tiene gran importancia en la
sustitución de importaciones, como les decía, y la reducción de los gastos en
divisas del país.
NUESTRO PUEBLO ES CAPAZ DE VENCER TODAS LAS
DIFICULTADES
El avance constatado, a pesar del déficit de recursos
materiales y financieros, aunque insuficientes, confirma las enormes potencialidades
que aún nos resta explotar en la agricultura y en todas las ramas de la
economía.
Los modestos resultados nos ratifican, una vez más,
el optimismo y la confianza en que ¡sí se puede!, y que nuestro pueblo heroico
es capaz de vencer todas las dificultades, por grandes que sean (Aplausos).
Es sin duda un enorme reto, en medio del bloqueo
económico y de muchas otras agresiones concebidas precisamente para impedir el
desarrollo de la nación.
Nuestro pueblo no ha fallado nunca a un llamado de la
patria. Invariablemente ha dicho presente desde los tiempos en que la tropa mambisa de Calixto García, el general de las tres guerras,
de la estrella en la frente, al suicidarse antes de caer prisionero, el hijo de
la madre heroica, enfrentó por estas tierras a muchos miles de soldados con un
armamento muy superior, con creces, el mayor ejército que la metrópoli española
envió a América.
Y junto al Ejército Libertador la población soportó,
estoicamente y sin cejar en la lucha, las incontables penurias provocadas por
la guerra y la cruel represión de las autoridades coloniales. Esa es nuestra
estirpe y seguiremos siendo fieles a su legado (Aplausos).
Con la unidad monolítica de nuestro pueblo, su más
poderosa arma, forjada en el crisol de la lucha bajo la dirección del Jefe de
la Revolución Fidel Castro Ruz (Aplausos), por
grandes que sean las dificultades y los peligros: ¡Seguiremos adelante!
(Aplausos.)
¡Gloria a los mártires de la Patria! (Exclamaciones
de: "¡Gloria!")
¡Viva Fidel! (Exclamaciones de: "¡Viva!")
¡Viva Cuba libre! (Exclamaciones de:
"¡Viva!")
(Ovación).