Reflexiones
del compañero Fidel
EL 67 ANIVERSARIO DE LA VICTORIA SOBRE
EL NAZI FASCISMO
Ningún hecho
político puede ser juzgado fuera de la época y las circunstancias en que tuvo
lugar. Nadie conoce siquiera el uno por ciento de la fabulosa historia del
hombre; pero gracias a ella, conocemos sucesos que rebasan los límites de lo
imaginable.
El
privilegio de haber conocido personas, incluso sitios en los que se llevaron a
cabo algunos de los sucesos relacionados con la histórica batalla, incrementaba
el interés con que esperaba este año la conmemoración.
La colosal
hazaña era fruto del heroísmo de un conjunto de pueblos que la revolución y el socialismo
habían unido y entrelazado para poner fin a la brutal explotación que el mundo
había soportado a lo largo de milenios. Los rusos estuvieron siempre orgullosos
de haber encabezado aquella revolución, y de los sacrificios con que fueron
capaces de llevarla a cabo.
Este
importantísimo aniversario de la victoria no podía ser comprendido bajo el
signo de una bandera y un nombre diferente al que presidió el heroísmo de los
combatientes de la Gran Guerra Patria. Quedaba algo sin duda intocable e
imborrable: el himno bajo cuyas inolvidables notas millones de hombres y
mujeres desafiaron la muerte, y aplastaron a los invasores que quisieron
imponer mil años de nazismo y holocausto a toda la humanidad.
Con esas
ideas en la mente, disfruté las horas que dediqué al desfile más organizado y
marcial que pude imaginar nunca, protagonizado por hombres formados en las
universidades militares rusas.
Los yankis y
los ejércitos sanguinarios de la OTAN seguramente no podían imaginarse que los
crímenes cometidos en Afganistán, Iraq y Libia; los ataques a Pakistán y Siria;
las amenazas contra Irán y otros países del Medio Oriente; las bases militares
en América Latina, África y Asia; podrían llevarse a cabo con absoluta
impunidad, sin que el mundo tomara conciencia de la insólita y descabellada
amenaza.
¡Qué pronto
se olvidan los imperios de las lecciones de la historia!
La técnica militar
exhibida en Moscú el 9 de mayo, mostraba la impresionante capacidad de la
Federación Rusa para ofrecer respuesta adecuada y variable a los más
sofisticados medios convencionales y nucleares del imperialismo.
Fue el acto
que esperábamos en el glorioso aniversario de la victoria soviética sobre el
fascismo.
Fidel Castro Ruz
Mayo 10 de 2012
8 y 14 p.m.