Prisión de Guantánamo

El presidente de los Estados Unidos vuelve a arremeter en su cuenta oficial de Twitter contra la administración de Barack Obama. Esta vez, la prisión de la Base Naval de Guantánamo estuvo en el centro de las críticas de Donald Trump contra su antecesor.

El maganate neoyorquino calificó como “una decisión terrible” la medida tomada por Obama para liberar o trasladar varios prisioneros de la polémica cárcel, que EE.UU. mantiene en el oriente de Cuba.

Además, atacó la política sanitaria y las relaciones con Rusia instauradas por el anterior mandatario.

“122 prisioneros viciosos liberados por la Administración Obama de Guantánamo han regresado al campo de batalla ¡Una decisión terrible!”, ha sentenciado Trump en un nuevo tuit publicado este martes.

Las declaraciones del mandatario hacen referencia a las cifras presentadas en el informe de la Oficina del Director de la Inteligencia Nacional de EE.UU. de 2012, pero en este documento consta que 113 de los prisioneros mencionados por Trump, no fueron puestos en libertad  por Obama, sino por su predecesor, George W. Bush.

La instalación se había convertido en objeto de acalorados debates por las acusaciones sobre el uso de torturas, lo que hizo que Obama prometiera cerrarla en numerosas ocasiones. Sin embargo, nunca cumplió su promesa. El actual inquilino de la Casa Blanca afirmó que su intención es seguir utilizándola en la lucha contra el Estado Islámico.

Desde el triunfo de la Revolución, Cuba pide a los Estados Unidos que le devuelva el territorio ocupado por la Base Naval en la Bahía de Guantánamo. La cárcel, que se encuentra dentro de esta base militar, ha sido criticada a nivel internacional y el cierre de la misma era un reclamo al que Obama atendió, pero no del todo, pues nunca se realizó en sus ocho años de mandato. Estas declaraciones de Trump suponen un paso atrás en la eliminación de un lamentable centro penintenciario, lugar de innumerables torturas.

¿Nueva Administración, nueva política?

Donald Trump continúa atacando las decisiones de Obama, a través de la red social Twitter.

Trump continuó su ataque verbal a Obama en un segundo tuit, arremetiendo esta vez contra el denominado ObamaCare. “Nuestro excelente nuevo Proyecto de Ley para la Asistencia Médica está listo para su revisión y negociaciones. El ObamaCare es un desastre completo y total: ¡está colapsándose rápidamente!”, escribió en la red social.

Minutos después el Presidente volvió a criticar en Twitter a su predecesor por tercera vez, en esta vez en referencia a las relaciones bilaterales entre EE.UU. y Rusia durante su presidencia. “Durante ocho años Rusia ‘atropelló’ al presidente Obama, se hizo cada vez más fuerte, tomó Crimea e instaló allá misiles. ¡Débil!”, ha proclamado el actual inquilino de la Casa Blanca.

El nuevo mandatario estadounidense sigue criticando a su predecesor y desatando la polémica. Por ejemplo, Trump acusó a la anterior Administración de interceptar comunicaciones, tanto propias como de los integrantes de su campaña electoral durante las presidenciales pasadas.

Ambas Administraciones discrepan también en relación con Rusia: la liderada por Obama había concentrado en Moscú numerosas críticas, las cuales empezaron en el momento del regreso a Rusia en 2014 de la Península de Crimea. Aunque realizada a través de un referéndum popular en el que la mayoría de la población de Crimea se manifestó en favor de reintegrarse en Rusia, este hecho dio comienzo a años de críticas contra Moscú procedentes de Washington y varios países europeos.

Incluso el mismo Trump fue acusado de mantener vínculos secretos con Rusia y de haber ganado solo gracias a la intervención de presuntos ‘hackers’ rusos –acusación lanzada por la Administración Obama sin prueba alguna–, afirmaciones que el magnate ha rechazado en varias ocasiones. El actual mandatario estadounidense afirma que, aunque respeta al presidente ruso Vladímir Putin, no mantiene ninguna relación con el Kremlin fuera del marco diplomático actual.

(Con información de Russian Today/ Cubadebate)