La Habana, 30 ago (Prensa Latina) De esencial consideraron las autoridades cubanas la participación ciudadana para enfrentar hoy la pandemia de la Covid-19 en el país, de conjunto con el esfuerzo gubernamental.
El presidente cubano, Miguel Díaz-Canel, expresó que el éxito no depende de las medidas restrictivas adoptadas, sino del protagonismo de la población en llevar adelante, de manera eficaz, el cumplimiento de las disposiciones.
Así lo manifestó el mandatario durante la reunión del gobierno dedicada al análisis de la situación epidemiológica, encuentro que este sábado profundizó en el escenario de La Habana, provincia donde entrarán en vigor el 1 de septiembre nuevas normativas para frenar la transmisión de la enfermedad.
Entre las restricciones se encuentran la prohibición de la circulación por la vía pública en el horario comprendido desde las 19:00, hora local, hasta las 05:00 del siguiente día, y la eliminación de los traslados interprovinciales, con la excepción de vehículos de carga, especialmente de alimentos.
Otra medida aprobada es limitar el traslado entre municipios de vendedores ambulantes y se establecen nuevos horarios para la venta en las tiendas recaudadores de divisas, las que atenderán solo a los residentes del municipio en que se encuentra.
El incumplimiento de las disposiciones conllevará la imposición de multas severas que van desde los tres mil a cuatro mil pesos (un peso cubano equivale a 1 dólar, en el cambio oficial) con plazos establecidos para su cancelación.
En el encuentro de ayer sábado Díaz-Canel se refirió a los sacrificios sociales, familiares y personales que implican esas decisiones, las cuales también impactan en la actividad económica del país.
No obstante, el jefe de Estado llamó a los residentes en la capital a superar este momento con responsabilidad, compromiso y ejemplaridad. 'Fuerza, Habana, seguro de que podremos y venceremos este rebrote', afirmó.
Cifras oficiales indican que de los 556 pacientes activos con el coronavirus SARS-CoV-2 en la isla, 487 son de la urbe capitalina, ciudad en la cual hay abiertos seis eventos de transmisión local y 167 focos en los 15 municipios.
Así lo manifestó el mandatario durante la reunión del gobierno dedicada al análisis de la situación epidemiológica, encuentro que este sábado profundizó en el escenario de La Habana, provincia donde entrarán en vigor el 1 de septiembre nuevas normativas para frenar la transmisión de la enfermedad.
Entre las restricciones se encuentran la prohibición de la circulación por la vía pública en el horario comprendido desde las 19:00, hora local, hasta las 05:00 del siguiente día, y la eliminación de los traslados interprovinciales, con la excepción de vehículos de carga, especialmente de alimentos.
Otra medida aprobada es limitar el traslado entre municipios de vendedores ambulantes y se establecen nuevos horarios para la venta en las tiendas recaudadores de divisas, las que atenderán solo a los residentes del municipio en que se encuentra.
El incumplimiento de las disposiciones conllevará la imposición de multas severas que van desde los tres mil a cuatro mil pesos (un peso cubano equivale a 1 dólar, en el cambio oficial) con plazos establecidos para su cancelación.
En el encuentro de ayer sábado Díaz-Canel se refirió a los sacrificios sociales, familiares y personales que implican esas decisiones, las cuales también impactan en la actividad económica del país.
No obstante, el jefe de Estado llamó a los residentes en la capital a superar este momento con responsabilidad, compromiso y ejemplaridad. 'Fuerza, Habana, seguro de que podremos y venceremos este rebrote', afirmó.
Cifras oficiales indican que de los 556 pacientes activos con el coronavirus SARS-CoV-2 en la isla, 487 son de la urbe capitalina, ciudad en la cual hay abiertos seis eventos de transmisión local y 167 focos en los 15 municipios.