La Habana, 20 sep - Hace seis años convocados por Naciones Unidas, prácticamente todos los líderes del mundo, nos comprometimos a "no dejar a nadie atrás", en el común propósito de cumplir para el 2030 con los llamados Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS), recordó hoy el Presidente de la República de Cuba, Miguel Díaz-Canel.
Al intervenir este lunes en el Segundo Momento ODS, durante el debate general del 76 período de sesiones de la Asamblea General de las Naciones Unidas, el mandatario resaltó que Cuba asumió los 17 compromisos, seria y responsablemente.
Pero también consciente de los grandes desafíos que impone la condición de Pequeño Estado Insular en Desarrollo, y el impacto del férreo bloqueo económico, comercial y financiero impuesto por los Estados Unidos, acotó Díaz-Canel en la cita virtual.
El Presidente cubano denunció la política hostil estadounidense, recrudecida de modo deliberado y oportunista en el contexto de la pandemia de COVID-19, y señaló que constituye el principal freno a los esfuerzos del país por avanzar en su desarrollo económico y social y en la implementación de la Agenda 2030.
Son enormes las dificultades, pero lo es también nuestra voluntad de construir una nación soberana, independiente, socialista, democrática, próspera y sostenible, dijo, y reiteró el compromiso de Cuba con la Agenda 2030, como puede confirmarse en la apreciable coherencia entre los objetivos y metas del Plan Nacional de Desarrollo Económico y Social hasta el 2030 y los ODS, afirmó el Presidente.
El jefe del Estado cubano añadió que a tono con el Informe Nacional Voluntario sobre la implementación de la Agenda 2030, las prioridades de su país se centran en impulsar el desarrollo integral y pleno de los seres humanos, lograr un desarrollo económico con equidad y mayores niveles y calidad de vida de la población.
Ratificó que se continurá avanzando "Con Paso 2030" por el camino del desarrollo sostenible, fortaleciendo la planificación y la coordinación a los diferentes niveles de gobierno, promoviendo la innovación, la investigación científica y la construcción de alianzas entre los diversos actores de la sociedad, como herramientas imprescindibles para la recuperación y el progreso.
Cuba también continuará compartiendo sus experiencias con otras naciones mediante la cooperación Sur-Sur, y apostando por un multilateralismo renovado y fortalecido, por la cooperación solidaria y la búsqueda de soluciones globales a los problemas comunes, manifestó Díaz-Canel.
Los revolucionarios somos optimistas incorregibles y, en el peor de los escenarios, buscamos y encontramos salidas porque creemos en el ser humano y creemos en el futuro, agregó.
Construir el mundo que soñamos es una tarea descomunal, pero posible, si renunciamos al egoísmo y trabajamos de conjunto por transformar el injusto orden internacional actual, en uno más justo, democrático y equitativo, en el que por fin nadie quede atrás, sostuvo.
Advirtió que en la actualidad un orden internacional injusto y antidemocrático es la causa de las desigualdades y la exclusión, en un escenario agravado por los devastadores efectos de la pandemia de COVID-19.
Según señala la ONU, el Momento ODS sirve para destacar anualmente los Objetivos de Desarrollo Sostenible, y en esta ocasión tiene lugar mientras el mundo experimenta una respuesta profundamente desigual a la pandemia de COVID-19, que corre el riesgo de crear una recuperación de dos niveles con implicaciones significativas para el avance de los ODS, especialmente en los países en desarrollo.
Convocado por el secretario general de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), Antonio Guterres, el evento incluye a más de 30 jefes de Estado.
