La Habana, 25 mar - Por el Bienestar y Años de Vida Activa de las Personas Mayores, es el lema que preside la Jornada Nacional de Geriatría y Gerontología, que se desarrollará en la capital el 29 y 30 de este mes.
El Complejo Docente del Hospital Salvador Allende es la sede del evento, auspiciado por esa institución y la Sociedad Cubana de Geriatría y Gerontología y dirigido a profesores, otros profesionales, estudiantes, enfermeros y médicos, anunció el comité organizador.
Las temáticas versarán sobre la Satisfacción de la Vida y salud; Actividad Física y Bienestar; Intersectorialidad en función de la Vida Activa; Salud Cognitiva; Gerocultura; Cuidadores y Cuidados en Busca de Bienestar y Voluntariado Estudiantil.
También incluye la Geroprofilaxis; la Prevención de la salud en la edad media y avanzada; Atención Médica en busca de Capacidad Funcional; Geriatrización de los Servicios Médico Sociales y Calidad Asistencial.
En Cuba el envejecimiento y la vejez es un asunto de toda la sociedad, si se tiene en cuenta que el 20,1 % del total de la población tiene 60 años o más, alertó en declaraciones a la Agencia Cubana de Noticias, Teresa Orosa, presidenta y profesora de la Cátedra del Adulto Mayor de la Universidad de La Habana.
También se refirió al desarrollo de la Gerontología en Cuba desde su diversidad multidisciplinaria y a la necesidad de encaminar proyectos bajo integraciones de carácter interdisciplinarios, a favor del bienestar de las personas mayores.
Cuba, uno de los países con mayor senectud en la región caribeña, desarrolla diversas acciones por lograr la consolidación de una cultura del envejecimiento, si se tiene en cuenta el aumento de la esperanza de vida de casi 80 años de edad.
Según los pronósticos, en 2050 el número de personas de más de 60 años aumentará de 600 millones a más de 2 mil millones.
Esa progresión tendrá un comportamiento ascendente en las naciones en desarrollo, donde ese segmento poblacional se multiplicará por cuatro dentro de tres o cuatro décadas, aseveran expertos en el tema.
Por tal motivo constituye un desafío aumentar las oportunidades de los adultos mayores, aprovechando al máximo sus capacidades para que sean socialmente útiles, expresó el doctor Alberto Fernández Seco, jefe del Grupo Nacional de Atención al Adulto Mayor del ministerio de Salud Pública.
Recordó que en 1982, cuando se celebró la Asamblea Mundial del Envejecimiento en Viena, Cuba ya contaba con un Plan Nacional de Atención al Anciano y dos años después, con la puesta en marcha del
Plan del Médico y la Enfermera de la Familia mejoró notablemente su atención.
En 1996, como consolidación de ese logro surgió el primer Programa Nacional de Atención Integral al Adulto Mayor, grupo etario que es atendido en todos los servicios de los más de 450 policlínicos del país, así como también en la atención secundaria y terciaria.
