Las crisis de vómitos repetidos en los adictos a la marihuana se conoce como síndrome de hiperemesis cannabinoide. Constituye un nuevo diagnóstico y representa hasta el 6 por ciento de los pacientes que acuden a los cuerpos de guardia con vómitos recurrentes en los países donde esta droga se consume con bastante liberalidad.
Se describió por primera vez en 2004 y asocia náuseas y vómitos cíclicos con dolor abdominal en marihuaneros habituales.
Como los fumadores de marihuana han aumentado en determinados países, este síndrome puede representar un diagnóstico importante a tener en cuenta en cualquier consulta de urgencia de pacientes con vómitos recurrentes.
Estas infelices personas con el síndrome de hiperemesis cannabinoide se caracterizan por tomar duchas o baños calientes de forma compulsiva como forma de aliviar los síntomas. Y como se refiere en el 90 al 100 por ciento de los casos notificados, se ha propuesto como otro criterio de diagnóstico.
El único tratamiento eficaz a largo plazo conocida para este síndrome es la eliminación definitiva de la marihuana cuando aún se está a tiempo. La mayoría de estos paciente reconocen fumar marihuana unas 4 a 6 veces al día durante más de un década y sus síntomas solo se alivian tomando duchas y baños calientes de 10 a 15 veces al día pues la exposición al agua caliente parece redistribuir el flujo sanguíneo a la piel y eso podría explicar el alivio de las manifestaciones digestivas.
Una vez rehidratados y confirmada la normalización de la función renal, se les da de alta con un seguimiento psiquiátrico para apoyar la abstinencia de esta droga. Unos años después del cese de su consumo, no aparece ninguno de estos síntomas.
Por qué se producen los vómitos
Para explicar estas manifestaciones se han expuesto diversas teoría y una de ellas en relación a cómo la marihuana altera la relación funcional normal entre el hipotálamo, la hipófisis y las glándulas suprarrenales, y eso afectaría al equilibrios de la digestión y la regulación de su temperatura, similar al síndrome de vómitos cíclicos resultando en niveles excesivos de metabolitos estimulantes de los vómitos de la marihuana; eso pudiera explicar las diferencias en las presentaciones clínicas entre los usuarios de las diferentes formas de presentación del cannabis. Este cuadro clínico puede anunciar complicaciones graves, como insuficiencia renal aguda, trastornos de los electrolitos, quemaduras en la piel o manifestaciones de falsa obstrucción intestinal.
Análisis necesarios
La detección de drogas en la orina puede ser útil en el diagnóstico en pacientes con vómitos recurrentes inexplicables, sobre todo si no informan sobre el uso de cannabis. Aunque no es necesaria ninguna otra investigación específica para establecer el diagnóstico de este síndrome tóxico, se requieren análisis de electrolitos como el sodio, el potasio o el cloro, y de la función renal para evaluar cualquier complicación, especialmente en casos de vómitos severos. La atención es esencialmente de apoyo con la rehidratación intravenosa, especialmente en casos de insuficiencia renal aguda y disminución del sodio en sangre conocida como hiponatremia.
La marihuana puede matar
El diagnóstico se basa en la historia clínica pues la mayoría son consumidores regulares de marihuana con náuseas y vómitos cíclicos severos. Muertes causadas por la tóxica marihuana y sus vómitos, probablemente asociadas con la deshidratación y alteración de los electrolitos, también se han reportado. Dr. Quirantes sobre crisis incontrolables producidas por la marihuana
