Atleta cubana

Ya están planificadas bases de entrenamientos entre abril y mayo y el comienzo de la ruta crítica competitiva.

Bases de entrenamiento en El Salvador y México marcarán el siguiente momento del atletismo cubano, que ya tiene prioridades trazadas para los XVIII Juegos Panamericanos de Lima 2019.

Así lo confirmó la comisionada nacional Yipsi Moreno en entrevista al programa televisivo Pulso Deportivo, en la cual también comentó sobre estrategias con los principales exponentes hacia la competencia fundamental del año, sin desconocer que luego habrá otro momento cumbre con el campeonato mundial de Doha, en Catar.

Especialidades como el salto de longitud y el triple entre hombres, y el lanzamiento del disco, el heptatlón y la pértiga de mujeres conforman el grupo de pruebas en que la Isla centra sus mayores esperanzas.

Juan Miguel Echevarría y Jordan Díaz para los dos primeros, y las conocidas Yaimé Pérez, Denia Caballero, Yorgelis Rodríguez y Yarisley Silva son los mencionados cuando de prioridades se trata, sin olvidar otras figuras que también se incluyen en cualquier proyecto de pronósticos.

Para todos se ha diseñado un plan de preparación que contempla entrenamiento en la altura para los especialistas de los 400 metros en adelante, entre ellos los hombres del relevo 4x400 con Yoandys Lescay, quien volvió a las sesiones de trabajo, y las también campeonas centrocaribeñas de la posta larga Roxana Gómez y Rose Mary Almanza.

La reina del martillo olímpico en Beijing 2008 adelantó que a tierras salvadoreñas viajarán los velocistas y los lanzadores, mientras otras especialidades harán su estancia en Monterrey, México.

Para mediados de abril se prevén las salidas en diferentes grupos, y para junio se planificó un segundo momento competitivo en casa con el Memorial Barrientos.

«Hemos planificado una ruta práctica y objetiva para conseguir los resultados», aseguró la directiva, quien mencionó la disciplina como factor primordial a exigir dentro del amplio grupo que se prepara.

Mítines internacionales en la zona del Caribe y participaciones en la Liga del Diamante con los de mayor rango, además de posibles asistencias a eventos en Europa conformarán también la ruta crítica.

Todavía no se han especificado qué lugares se incluirán en esa programación, pues aún se ajustan itinerarios y posibles invitaciones, pero seguramente se repetirá el formato de años anteriores: intervenir en aquellos que tributen a la mejor puesta en forma.

Entendidos del deporte hablan de entre tres y cinco títulos como aporte del atletismo en Lima, una cifra que responde a realidades objetivas y que pudiera aumentar en dependencia de la presencia o no de las mejores figuras rivales, además del buen desempeño de los cubanos.

Algunas pruebas como el salto largo con Juan Miguel, el disco que debe aportar el 1-2 con Yaimé y Denia –ellas serán las encargadas del orden– y el heptatlón de Yorgelis parecen no tener discusión.

Para Jordan el triple será todo un reto por su juventud y los actuales resultados en la región, en tanto Yarisley irá a defender su corona de Toronto en una especialidad complicada no solo por varias estadounidenses, sino también por la venezolana Robeilys Peinado.

De todas maneras, a la campeona mundial de Beijing 2015 le sobra maestría y coraje para enfrentar retos como el que ahora tiene por delante. A momentos críticos se ha enfrentado infinidad de veces y está más que probado cuánto se crece ante el reto.