Hanoi, 28 ago (Prensa Latina) A partir de ahora, todo lo que hagamos en La Colmenita será tratando de imitar esta alegría, este optimismo, esta esperanza, afirmó hoy aquí el director de la compañía cubana de teatro infantil, Carlos Cremata.

Notablemente emocionado al término de un conmovedor encuentro entre sus “colmeneros” y alumnos de la escuela primaria Vietnam-Cuba, Cremata declaró a Prensa Latina que “estos niños son el amor hecho seres humanos, y eso es lo que se merece realmente la humanidad toda”.

El también fundador, en febrero de 1990, de la reconocida agrupación artística cubana dijo que, como el resto del colectivo, se sentía profundamente impresionado con esta visita a Vietnam.

Para cualquier cubano es un privilegio muy grande venir a esta tierra en el año en que conmemoramos el 65 aniversario de relaciones absolutamente ejemplares por las dos partes.

“O sea, no se sabe quién ha querido más a quién: si los cubanos a los vietnamitas, o ellos a nosotros; pero vivirlo aquí en Vietnam, entre sus héroes de antes y los del futuro: estos niños, que nos han enamorado profundamente, resulta una experiencia maravillosa”, manifestó.

Nosotros, a partir de ahora, todo lo que hagamos en La Colmenita será tratando de imitar esta alegría, este optimismo, esta esperanza, remarcó antes de afirmar que el encuentro de hoy en la escuela Vietnam-Cuba es un ejemplo de relaciones sinceras, de amor, de paz.

Relató que durante estos días en Hanoi recibieron incontables muestras de cariño y pudieron sentir, muy de cerca, el afecto enorme que sienten los vietnamitas por el pueblo cubano.

“Muchos en las calles nos enseñaban sus brazos, donde recibieron la vacuna cubana Soberana con mucho amor. Nosotros acabamos de inyectarnos de energía y amor para todo lo que nos queda de Colmenita, que va a ser aproximadamente el tiempo que durará la amistad entre Cuba y Vietnam: mínimo 65 millones de años”, vaticinó.

Mientras, en declaraciones a una televisora local que recabó sus impresiones sobre el acto que acababa de concluir, Cremata afirmó: “este es el sueño de Fidel Castro, de José Martí y de Ho Chi Minh: que nuestro futuro, nuestra infancia se abrace muy fuerte, comparta una gran sonrisa y se ame para siempre”.

Estamos muy enamorados de todos ustedes, confesó.

La Colmenita, designada en 2007 como Embajadora de Buena Voluntad de la Unicef, se presentó el martes último en el moderno Teatro Ho Guom, en el contexto del Año de la Amistad Vietnam-Cuba y el 65 aniversario del establecimiento de relaciones diplomáticas, y para conmemorar los 80 años de la independencia de Vietnam.

“Cenicienta… según los Beatles”, una versión renovada del clásico cuento de hadas acompañada por las canciones inmortales del legendario grupo británico, fue esta vez la carta de presentación de los “colmeneros”, que dejaron una impresión inolvidable en los corazones de la audiencia vietnamita.

Los pequeños actores llevaron al público de vuelta a una infancia viva, inocente y alegre, publicó en Facebook el propio teatro, que consideró inolvidable el momento cuando un niño cubano exclamó “Vietnam, Ho Chi Minh” y el público respondió entonando la canción “Como si estuviera el Tío Ho en el Día de la gran victoria”.