Los equipos cubanos continuarán este fin de semana su participación en el circuito internacional de judo, en busca de puntos para el ranking olímpico.
La nueva oportunidad llegará del 8 al 10 de marzo en el Grand Prix de Austria, que pese a no tener categoría de grand slam contará con 17 competidores del top 10 en distintas divisiones.
Un total de 528 judocas de alrededor de 80 nacionalidades aumentarán la dificultad del evento, que acogerá también a dos campeones olímpicos, el checo Lukas Krpalek (+100 kg) y la cubana Idalys Ortiz (+78 kg kg), y a 13 medallistas de oro en campeonatos mundiales.
La cercanía con los Juegos Olímpicos de París 2024 y la premura de los judocas por ascender puestos en el ranking le convierten en una parada muy codiciada.
Jonathan Charón (60 kg) tendrá oportunidad para pasar de su primer combate, entendiendo que enfrentará a un rival de menor ubicación como el israelí Lior Rafailov. Incluso presenta credenciales para imponerse al alemán Maximilian Heyder, que esperará sembrado en segunda ronda al ganador de ese pleito.
La dificultad para el joven Charón llegaría en la tercera salida, pues se vería con el español Francisco Garrigós, dos veces campeón del mundo, líder del ranking mundial y sexto clasificado en el listado olímpico.
Sumar resulta la premisa de orden, pero medirse a un extraclase como el campeón del mundo vigente representa un bono en su todavía naciente carrera deportiva.
Menos complejo parece el organigrama para Orlando Polanco (66 kg), sembrado para la segunda ronda, en que tendrá como oponente al alemán Martin Setz.
Este combate se antoja la antesala de otro más importante, ante el colombiano Juan Hernández, quien va por el mismo brazo del organigrama y ocupa uno de los cupos continentales a París 2024.
Acumular más de 260 puntos le haría desplazar al canadiense Julien Frascadore de la otra plaza continental en la división. Aunque no logre esa cifra, otra vez tiene la oportunidad de recortarle distancia, pues el norteño no competirá.
Magdiel Estrada (73 kg) tiene delante una inmejorable oportunidad de entrar en puestos de clasificación directa, no solo por encontrarse sembrado y debutar en segunda ronda ante un rival de menor categoría como el coreano Kang Heon Cheol, sino porque solo tres hombres mejor ranqueados que él participan en el gran premio austriaco.
Uno de los judocas que le antecede en el escalafón pudiera tocarle como rival directo en cuartos de final. Se trata del estadounidense Jack Yonesuka, a quien venció en un campeonato panamericano en 2023 y ocupa el último boleto directo a los Juegos Olímpicos de París.
Iván Silva (90 kg) irá cómodo en la llave C. Presumiblemente no enfrentaría a un rival de consideración hasta los cuartos de final, en que vería al estadounidense John Jayne, a quien ha vencido en el pasado. En semifinales podría chocar con un viejo conocido, el brasileño Rafael Macedo, a quien venció recientemente en la final de los XIX Juegos Panamericanos de Santiago 2023.
Cerrará la competición para los hombres el campeón mundial Andy Granda (+100 kg), a quien su posición de privilegio en el escalafón le ubicó como el único sembrado del apartado, alejado de la posibilidad de enfrentar a los dos contendientes más fuertes (el checo Lukas Krpalek o el gerogiano Guram Tushishvili) hasta una hipotética final.
Entre las féminas solo aparecen inscritas Maylín del Toro (63 kg) e Idalys Ortiz (+78 kg), resaltando la ausencia de Idelannis Gómez (70 kg), precisamente quien más apuros enfrenta para llegar a París 2024.
Del Toro combatirá en una de las divisiones más difíciles del torneo, pero no parece tener mayores problemas para llegar a cuartos de final, en que enfrentaría a la mexicana Prisca Awiti, favorita para avanzar ante sus contendientes y a quien venció en la anterior ocasión en que se vieron.
Ortiz deberá mostrar su mejor versión para salir ilesa de la llave A, en que enfrentará a la alemana Samira Bouizgarne. De ganar, encontraría en el camino a la emergente dominicana Moira Morillo y a la estelar brasileña Beatriz Souza, rivales a las que ha podido derrotar en el pasado reciente, pero que muestran una excelente forma.
(Tomado de JIT)