La Unesco anunció hoy que dedicará el Día Internacional de la Educación (24 de enero) a los esfuerzos para luchar contra la incitación al odio, un fenómeno con creciente impacto en las sociedades.
“La propagación acelerada de la incitación al odio es una amenaza para todas las comunidades. Nuestra mejor defensa es la educación, que debe estar en el centro de cualquier esfuerzo por la paz”, adelantó en un mensaje a propósito de la cercana jornada la directora general de la organización, Audrey Azoulay.
En sus comentarios, consideró un deber colectivo preparar a los alumnos de todas las edades para desmantelar los discursos de odio y sentar las bases de sociedades integradoras, democráticas y respetuosas de los derechos humanos.
Para lograrlo, necesitamos formar y apoyar mejor a los docentes que están en la primera línea para superar este fenómeno, advirtió Azoulay.
De acuerdo con la Unesco, en los últimos años se ha acelerado el problema por su proliferación en las redes sociales, alimentando los prejuicios y la discriminación y generando un escenario propicio para la violencia.
Por eso, el ente multilateral instó a sus 194 Estados miembros a priorizar la educación como una herramienta promotora de la dignidad humana y la paz.
La Asamblea General de la ONU estableció el 24 de enero como el Día Internacional de la Educación para celebrar su aporte a la paz y al desarrollo.
Ese día, la Unesco organizará una formación en línea para miles de docentes de todo el planeta, con herramientas que ayudan a detectar, abordar y prevenir mejor los incidentes relacionados con la incitación al odio.
Por su parte, la sede de las Naciones Unidas en Nueva York reunirá a ministros, responsables de educación y educadores de todo el mundo para debatir sobre el papel central de la enseñanza en la consecución de una paz mundial sostenible.