La Habana, Cuba. – Que nuestro texto constitucional sea de vanguardia, inclusivo, profundamente humanista, que tenga en el centro al ciudadano, la mujer, la niña y el niño, a los ancianos; una Carta Magna para el futuro, como garantía y confianza para los jóvenes.
Justo por ese camino transitamos los cubanos desde el 13 de agosto, en un recorrido que se extenderá hasta el 15 de noviembre, para enriquecer un proyecto de ley de leyes que, no hay dudas, ya tiene dichas esencias.
En la consulta popular, amplio y verdadero ejercicio de democracia, los ciudadanos de esta Isla tienen la oportunidad de opinar y emitir sus criterios para ratificar el contenido del texto, así como formular propuestas de adición o supresión.
De lo que se trata es de crear, entre todos, una Carta Magna más atemperada a la Cuba de hoy, para consolidar y dar continuidad a un sistema socialista, democrático, próspero y sostenible.