El Centro de Neurociencias de Cuba (Cneuro), perteneciente al Grupo Empresarial BioCubaFarma, continúa acumulando resultados para el avance tecnológico en la Isla en función de la salud, ahora con la fabricación de insumos para el enfrentamiento a la COVID-19 y la reciente puesta en marcha de dos plantas para la producción de mascarillas quirúrgicas e hisopos, respectivamente.
Según informó a Granma Antonio Fernández Mastrapa, director de Producción del Cneuro, la planta de hisopos, con una capacidad de producción de 200 000 unidades diarias, ya ha entregado al Ministerio de Salud Pública alrededor de 1 750 000 desde el mes de marzo; en tanto, se confeccionan en el taller alrededor de 40 mascarillas por minuto, que sumaría entre 14 000 y 16 000 diarias.
Estas nuevas plantas son resultado de gestiones que comenzaron a raíz de la pandemia y ante la necesidad de reforzar los medios de protección contra la enfermedad, especialmente en el personal sanitario, agregó.
«Por una parte, a través del Programa de Naciones Unidas para el Desarrollo, se gestionaron cerca de 200 000 dólares para adquirir la maquinaria de fabricación de hisopos, que responde a dos líneas: pruebas de PCR y uso general en función del sector de la Salud».
Explicó que el proyecto Incrementar las medidas de prevención y enfrentamiento contra la COVID-19 en Cuba, cofinanciado por la Unión Europea, propició un financiamiento de más de 250 000 euros que, entre otros destinos, tributa a la producción de mascarillas quirúrgicas desechables. Estos permiten garantizar la sostenibilidad de productos para el diagnóstico de la enfermedad y la protección de quienes están en la primera línea de enfrentamiento.
Cneuro ha participado, de conjunto con otras instituciones y trabajadores por cuenta propia, en la fabricación de ventiladores pulmonares de emergencia y protectores faciales para el personal sanitario.