Francisco Durán, director nacional de Higiene y Epidemiología

Francisco Durán, director nacional de Higiene y Epidemiología, informó hoy en conferencia de prensa que se mantiene una transmisión activa de arbovirosis en el país.

Uno de ellos resulta el dengue, con una mayor tasa de incidencia en las provincias de Pinar del Río, Mayabeque, Cienfuegos y Villa Clara, en la última semana, dijo.

El especialista manifestó que existen pacientes ingresados por este virus, se han tratado casos graves, pero el personal de salud trabaja para evitar complicaciones, pues puede provocar la muerte. 

Refirió también la presencia de casos con sospecha de oropouche (virus causado por la picadura del mosquito y jején del género culex y culicoide) en 15 provincias, 106 municipios y 193 áreas de salud.

Llamó a extremar las medidas de higiene, el saneamiento del entorno, evitar acumulaciones de agua, pues estas intensas lluvias provocadas por el huracán Helene inciden en la proliferación de mosquitos.

Reiteró la necesidad de acudir de inmediato al médico ante cualquier síntoma asociado a dolores de cabeza, articulares, vómitos, diarreas y temperaturas altas, para hacer un diagnóstico adecuado por la co-circulación de ambas arbovirosis, con una sintomatología bastante similar.

Durán manifestó que el país mantiene una estricta vigilancia epidemiológica y se realizan estudios entomológicos para conocer las características de los vectores, liderado por el Instituto de Medicina Tropical Pedro Kouri.

Se ejecuta un paquete de investigaciones sobre el manejo clínico de la enfermedad en Cuba y sus especificidades en cada grupo etario, con apoyo de expertos en clínica, pediatría, obstetricia, entre otras áreas médicas, precisó.

De igual modo, se ejecutan otras indagaciones sobre el vínculo entre el medioambiente y la enfermedad para determinar la influencia del cambio climático en el brote de epidemias, subrayó el especialista.

Comentó, además, sobre la gestión de la ciencia y la innovación para dar respuesta al Oropouche en Cuba, con tareas dirigidas por el Centro Nacional de Inmunoensayo para obtener un test de diagnóstico rápido y la factibilidad o no de obtener una vacuna para la prevención de la enfermedad, misión que asume el Instituto Finlay.