El Monumento Nacional a Henry Reeve, el “Inglesito” enclavado en el sitio donde cayó, en áreas de la vía que conduce del poblado de Yaguaramas a la Ciénaga de Zapata y Playa Girón en el municipio de Abreus, es objeto de una reparación capital, que debe concluir próximamente.
Oileder Tardío Rodríguez, inversionista de la Dirección Provincial de Comunales declaró a esta periodista que se trata de “una inversión total del inmueble, el cual ya tiene varios años de construido y persigue cambiar la estructura que tiene actualmente.
“Dispondrá de una Sala de Historia, con la obra de este patriota norteamericano, que peleó en la Guerra de Independencia. Se va hacer una Plaza de Actos y mejorará la iluminación. También trabajan en un parqueo para que las personas no paren los vehículos encima de la vía, en el momento que visitan el histórico lugar.
“Plantaremos aquí un roble americano y va a ser la insignia unido al cambio de la valla, que identifica el sitio con la foto y el nombre de Henry Reeve, además de un grupo de acciones, desde el punto de vista del arbolado y áreas verdes, entre otras que al terminar realzarán la vida del insigne patriota”.
Apunta Tardío que el antiguo monumento quedó desmantelado e iniciaron la reestructuración junto con labores que incluyen la fundición de aceras previstas en el proyecto.“Se está trabajando aceleradamente», comenta, y llama mucho la atención el levantamiento de la edificación del local donde va a quedar la Sala de Historia. Esta inversión en la rehabilitación que se está haciendo al monumento debe alcanzar un presupuesto aproximado de dos millones de pesos.
“Todo quedará como se lo merece el patriota y los médicos cienfuegueros y de toda Cuba que forman parte de brigadas internacionalistas del Contingente Henry Reeve. Los trabajadores de la salud, sí patriotas de estos tiempos. Las brigadas que nos representan en el mundo”.
El brigadier Henry Reeve, cayó heroicamente en combate, el 4 de agosto de 1876. El Cementerio Municipal de Reina, en la ciudad cubana de Cienfuegos, hospeda en una tumba anónima los restos del joven oficial de 26 años, nacido en la barriada de Brooklyn, Nueva York, y que desde los 19 había ingresado en las filas del Ejército Libertador de Cuba.
(Con información de 5 de Septiembre)