El Gobierno y pueblo de Japón enviaron a Cuba un donativo de purificadores de agua, almohadillas para dormir, mantas y tiendas de campaña, un grupo de suministros proporcionados por la Agencia de Cooperación Internacional del Japón (JICA), los cuales legarán a los afectados por el huracán en la occidental provincia de Artemisa.
Nakamura Kazuhito, embajador de Japón en Cuba, expresó durante la ceremonia de recibimiento del donativo que tanto esa nación asiática como la mayor de las Antillas sufren las consecuencias de los fenómenos naturales, motivo que conduce a ambos pueblos a la unidad en situaciones de emergencia.
Son impactantes los daños que dejó el huracán Rafael en el Occidente del archipiélago, lo cual motivó a tener este gesto solidario con el pueblo cubano, señaló.
El embajador subrayó que en estos difíciles momentos la ayuda contribuirá a mejorar en cierta medida las condiciones de vida de las personas afectadas.
Comentó que el donativo se suma a la lista de similares acciones del pueblo y gobierno japoneses en situaciones de desastres en Cuba, como ocurrió con los huracanes Matthew (2016), Irma (2017) e Ian (2022).
Estoy convencido de que, como en otras ocasiones, el pueblo de la isla mostrará su capacidad para superar los momentos difíciles, dijo Nakamura.
Ashida Tatsuya, representante residente de JICA, destacó que, además del Acuerdo de Cooperación Técnica firmado entre los gobiernos de Japón y Cuba, esta agencia ha establecido un mecanismo de ayuda de emergencia para responder con prontitud a desastres y a las necesidades de los damnificados.
Seguiremos colaborando con la nación antillana para garantizar que los suministros lleguen lo antes posible a los más afectados y para el desarrollo del país, manifestó.
Déborah Rivas, viceministra del Comercio Exterior y la Inversión Extranjera, agradeció al pueblo y gobierno japoneses por ese gesto de solidaridad que demuestra que Cuba no está sola.
El donativo es una expresión verdadera de la vocación humanista y los lazos especiales que unen a ambos países y los insumos que contiene se entregarán de inmediato a los damnificados en la provincia de Artemisa, indicó la viceministra.
Desde el pasado 6 de noviembre, fecha en el que el huracán Rafael tocó suelo artemiseño, esa provincia se encuentra inmersa en la recuperación de los servicios de electricidad, así como del fondo habitacional, institucional y de la producción agropecuaria dañada por los estragos del fenómeno meteorológico.