Cuba esconde auténticos regalos de la madre naturaleza. Si te adentras entre su verde flora, puedes descubrir auténticos paraísos que se alejan del claro azul del mar caribe.
Para empezar este recorrido por algunos de los principales parques naturales de Cuba, vamos a seguir tocando el agua, pues la Laguna del Tesoro es nuestra primera parada.
Cuenta la leyenda que recibe este nombre debido a que los nativos que vivían a los alrededores escondieron en el fondo del lago sus riquezas más preciadas, por miedo a que pudieran caer en manos de los colonizadores. Para que los visitantes se adentren en las épocas precolombinas, en el llamado Centro Turístico Guamá se ha construido una réplica de una aldea Taína con viviendas típicas de los aborígenes cubanos y 25 esculturas a escala natural realizadas por la artista Rita Longa.
La Laguna del Tesoro posee una vegetación acuática en sus canales que favorece la reproducción de la trucha de boca grande. También se pueden apreciar ejemplares de manjuarí o manatí, endémicos cubanos. Salvo la trucha, su pesca está prohibida. Sin embargo, se pueden realizar actividades de observación.
El Parque Nacional Caguanes
En 22 000 hectáreas de mar y tierra, se encuentra el Parque Nacional Caguanes, declarado Reserva de la Biosfera por la Unesco.
Cuaganes destaca por un sistema cavernario de 11 km formados por galerías subterráneas. En ellas, concretamente en la Cueva de Ramos, está ubicado el dibujo rupestre más importante con 24 pictografías. En el sistema se conservan las huellas de los pueblos que un día vivieron allí. Todo ello convive con ecosistemas que son hábitat de fauna como la grulla cubana, el ave más grande del país, o el murciélago mariposa, el más pequeño del mundo en esta especie. Además, estos parajes se combinan con cayos como el de Las Brujas o el de Santamaría, que ofrecen la tranquilidad de la playa.
El Parque Nacional Alejandro de Humboldt
Su nombre se debe al científico alemán, que en el siglo XIX recorrió Cuba. Es considerado el área protegida más importante del país y esto se debe a que posee una de las mayores densidades vegetales y endemismos del planeta. Posee un 2% de las especies de flora de la Tierra. Es un contraste formado por montañas y bosques, además de ríos. En fauna, destacan el por poco extinto carpintero real, la rana más pequeña del mundo o la Gambusia Punctata, una de las escasas especies de agua dulce cubanas.
Considerado la mayor reserva en las Antillas, fue declarado Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO.
Por último, pasearemos por el Parque Natural Montemar. Es uno de los lugares cubanos destacados en el turismo ecológico y ofrece todo tipo de actividades, desde deportes a observación de aves.
El mayo humedal del caribe, ubicado en la Península de Zapata, posee ríos, lagos, zonas vírgenes, marismas y el 30% de la fauna cubana, con hasta 171 especies de aves.
Dentro de Montemar se encuentra la ciénaga de Zapata, una de las áreas boscosas más importantes del país. Destaca dentro de ella el manjuarí, denominado pez fósil debido a que guarda bastantes semejanzas con sus antepasados y no muestra muchos rasgos evolutivos. La ciénaga es también el reservorio más importante que existe de aves migratorias en Cuba.
También se encuentra en este Parque Natural el santuario de Vida Silvestre de Las Salinas, característico por sus marismas y por ser un buen lugar en el que observar aves y pescar. Montemar es también reserva de la Biosfera por la UNESCO.