Resulta ya una tradición de que en diciembre los miembros de la Sociedad de Dobles de Hemingway (en inglés, Hemingway Look Alike Society), de La Florida, rememoren en Cuba pasajes y momentos de la vida y obra del escritor norteamericano y Premio Nobel de Literatura, quien consideró a la Isla como su segunda patria.
De acuerdo con la Web de la institución, este fin de semana ellos estuvieron en el hotel Ambos Mundos, en cuya habitación 511 el famoso novelista se hospedó de 1932 a 1939, en el bar-restaurante El Floridita, donde disfrutaba de su cóctel Daiquirí, en sitios de Cojímar y en el Museo finca La Vigía, en la que vivió durante más de 20 años, lugares todos en la capital cubana.
En la costera localidad de La Habana del Este, espontánea y cálida acogida les brindaron pobladores y turistas a los 20 barbudos, muy parecidos al autor de El viejo y el mar, vestidos con el uniforme de safari que usaba y portando la medalla con el año en que cada uno ganó el campeonato para elegir al doble más parecido a él.
Acompañados de Mabel Blanco y Wilver Orlando Aguilera, promotores del proyecto de desarrollo local Pintura mural en honor a Ernest Hemingway, los visitantes recorrieron el centro histórico de Cojímar.
En éste se halla la fortaleza colonial El Torreón, desde 1962 el primer monumento erigido en el mundo en su honor tras fallecer, el pequeño espigón en el cual solía atracar su embarcación El Pilar luego de alguna una jornada de pesca, y el remozado bar-restaurante Las Terrazas, espacio de encuentros con los pescadores locales.
Diversas preguntas hicieron los miembros de Hemingway Look Alike Society a esos investigadores de su vida y obra, quienes les informaron del empeño, con el apoyo de las autoridades correspondientes, de concebir la ruta dedicada al notable intelectual norteamericano, particularmente en la costera localidad inmortalizada con su obra El viejo y el mar.
Sería un corredor turístico y cultural que abarcaría el centro histórico, y el mencionado proyecto consistente en la exhibición de la pintura mural más grande del mundo a cielo abierto con cuadros sobre el novelista.
Incluiría también el bar-restaurante Las Terrazas, el nuevo restaurante La ruta de Hemingway y la base de pesca que lleva su nombre, ubicada en la desembocadura del río Cojímar.
Mabel y Wilver contaron a este reportero cuán contentos y admirados por la hospitalidad de los cubanos se sintieron los visitantes, quienes donaron atavíos de pesca para los pescadores, como después hicieron en el museo Finca La Vigía al obsequiar implementos deportivos a niños, además de jugar pelota con ellos y picar un cake.
En su cuenta en Facebook, Grisell Fraga, su directora, escribió este domingo:
"De lujo la celebración del XIII encuentro de beisbol infantil del Proyecto Estrellas de Gigi, del Museo Ernest Hemingway; muchas gracias a Brian Gordon Sinclair por su dedicación y a los amigos de Hemingway Look Alike Society por su participación. Excelente actividad".