Clima

Conversábamos en la entrega anterior del “día más meteorológico del año”, cuya fecha en el calendario es siempre precedida, además de por el comienzo desde el punto de vista astronómico de la primavera en el hemisferio norte, por otras fechas mundiales como el Día Mundial de los glaciares y el Día Mundial del Agua. Se excluyó de esa lista otro día también cercano, que coincide exactamente hoy 26 de marzo y que no es menos importante.

El Día Mundial del Clima fue instaurado hace 33 años en 1992 por la Convención Marco de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático con el objetivo de, más que centrarse en esa rama de la meteorología, llamar la atención sobre la importancia e influencia del clima. Incluso desde esa fecha, todavía anterior a la Cumbre de Río ese mismo año, en donde se lograron tomar acuerdos que signan el camino de las políticas para mitigar los efectos del cambio climático, ya se buscaba concienciar y sensibilizar sobre los posibles efectos del mismo, que tres décadas después estamos sintiendo.

Como mencionó la secretaria general de la Organización Meteorológica Mundial, Prof. Celeste Saulo: “La historia del clima se está desarrollando ante nuestros ojos. No hemos tenido solo uno o dos años récord, sino una serie completa de diez años. Esto ha estado acompañado de fenómenos meteorológicos devastadores y extremos, el aumento del nivel del mar y el derretimiento del hielo, todo ello impulsado por niveles récord de gases de efecto invernadero debido a las actividades humanas.” El año 2024 ha sido el más cálido en la historia y no de manera aislada como se señala, sino que cierra la década más cálida en los registros, con un valor de 1.55 grados Celsius por encima la referencia climática.

Por tanto, no está de más congratular en esta fecha a aquellos que directamente tributan a esta rama de la meteorología (y que no podemos dejar de señalar que no es sinónimo de tiempo), a la que nos unimos desde este espacio, para reconocer la labor de los climatólogos cubanos, los cuales en muchos casos combinan sus funciones con el estudio de otras ramas de las ciencias.

Pero sí, es un día además para pensar en que tenemos un solo planeta y con una sola atmósfera, que los cambios evidentes y eventos extremos no nos pueden ser ajenos aunque (ahora) sean lejanos y que las fronteras políticas no limitan a los elementos naturales. Que con todo el avance actual, somos incluso hoy tan o más vulnerables a los efectos del clima y que además este está cambiando de una manera que puede redefinir todo lo que la humanidad ha visto, y que e s la base sobre la que se ha desarrollado por cientos de años.

A la larga, la lucha contra el cambio climático no solo vendrá de las grandes acciones de los gobiernos, que son muy importantes, sino también de las pequeñas acciones individuales, que no requieren más que en nuestro día a día vivamos conscientes de ello y actuemos con nuestras propias manos.