La Habana, 5 mar (RHC) Pocas combinaciones suenan tan saludables como la de mezclar el deporte con el cuidado del medio ambiente. Esta es la propuesta que nos llega desde Suecia y que se ha convertido en toda una moda.
Se llama plogging y consiste en algo tan sencillo y a la vez revolucionario como combinar deporte con la recogida de basura. La idea nació en Estocolmo en 2016 y, desde entonces, se extiende por todo el mundo, especialmente si nos referimos al plogging unido al running.
El término procede de la suma de dos palabras: jogging (“correr”) y polca app (“recoger” en sueco), aunque acoge también a cualquier práctica deportiva a la que se le una el plus de recoger basura.
En cuanto a la persona responsable de esta nueva moda, se trata de Erik Ahlström, un joven vinculado a la conocida activista Greta Thunberg que, tras mudarse a Estocolmo desde una pequeña localidad sueca, comenzó a incorporar a su rutina la recogida de basura durante su rutina de deporte diaria.
Lo sencillo y lo útil de esta práctica ha provocado que se convierta en algo viral: se calcula que unas 25.000 personas lo practican en todo el mundo, y la cifra no deja de crecer.
El movimiento cuenta también con una página web, y cada vez surgen más grupos locales en diferentes áreas geográfica que organizan y lideran campañas concretas.
España es uno de los países que se suma a esta tendencia: existen encuentros para recoger basura mientras se practica el running, como es el caso del Plogging Tour que tuvo lugar a principios de este año en Ibiza, y que reunió a más de 1.500 personas.
Aunque el plogging se encuentra especialmente vinculado al running, lo cierto es que puede practicarse a través de cualquier deporte: bicicleta, surf, piragüismo…
Los ploggers aseguran, además, que la actividad física vinculada al hecho de agacharse para recoger basura intensifica la actividad física y ayuda a poner en movimiento músculos que, de otra forma, tal vez no estaríamos ejercitando.