Presidente Miguel Díaz-Canel

La Habana, 3 feb. - Para Cuba resulta inaceptable la deportación violenta e indiscriminada de migrantes en Estados Unidos, las detenciones arbitrarias y otras violaciones de derechos humanos, afirmó hoy el presidente Miguel Díaz-Canel.

Durante su intervención virtual en la XII cumbre extraordinaria de la Alianza Bolivariana para los Pueblos de Nuestra América-Tratado de Comercio de los Pueblos (ALBA-TCP), el mandatario denunció que esas medidas también se emplean como armas de chantaje y presión política contra los pueblos de “Nuestra América”.

“El establecimiento de un centro de detención en la base naval norteamericana en Guantánamo, en el que se pretende encarcelar decenas de miles de personas, constituye un acto barbárico”, condenó.

El jefe de Estado valoró que la construcción de una perspectiva migratoria de paz, entendimiento y colaboración sin politización es un asunto que requiere de un esfuerzo colectivo y mancomunado.

Recordó que la mayor parte de los migrantes que se encuentran en territorio estadounidense llegaron ahí atraídos por su desarrollo económico y para satisfacer necesidades básicas que las economías de sus naciones no son capaces de proveer.

“En el caso particular de Cuba es ampliamente conocida la política del gobierno norteamericano de ofrecer un tratamiento privilegiado al emigrante cubano con independencia de la vía por la que llegue a ese país, a lo que se agrega el impacto del bloqueo económico y la política de máxima presión”, acotó.

Díaz-Canel precisó que los migrantes y los flujos migratorios no son un problema sino un fenómeno de nuestros tiempos, una expresión de los desafíos del sistema internacional y del injusto orden económico imperante.

Sobre los nuevos retos de la cooperación internacional, derivados por las órdenes ejecutivas de la administración de Donald Trump, consideró que es necesario fortalecer las respuestas provenientes del Sur.

En ese sentido, subrayó que la capacidad de concertación regional será vital para exigir lo que “por derecho nos pertenece”, a la vez que instó a responder con unidad y la globalización de la solidaridad, frente a la contraofensiva imperialista.

En el marco del ALBA-TCP, señaló como una prioridad fortalecer una agenda económica basada en la complementariedad, que aproveche todas las potencialidades de cada país.

Resaltó la importancia de la Agenda Estratégica 2030 de la Alianza y se refirió a la importancia de fortalecer iniciativas como AgroALBA.

Precisó que ahora corresponde trabajar en el ámbito bilateral para establecer modalidades que contribuyan a incrementar la producción de alimentos y “garantizar nuestra seguridad alimentaria y nutricional”.

El presidente cubano afirmó que resultará esencial establecer rutas de comunicación marítimas y aéreas que mejoren la conexión entre los países comprometidos en lo que respecta a la inteligencia artificial.

Díaz-Canel reafirmó el compromiso de Cuba con la integración y colaboración en la búsqueda del bienestar de los pueblos.