La Habana, 24 abr.- Especialistas de la Empresa de Investigaciones y Proyectos Hidráulicos de La Habana desarrollaron un conjunto de innovaciones concebidas para proteger a las presas cubanas frente a los impactos del cambio climático.
Soluciones relacionadas con la operación automatizada de los aliviaderos de compuertas y el pronóstico de las crecidas en los embalses, figuran entre los aportes de ese resultado científico, que mereció recientemente el Premio Nacional de Innovación Tecnológica 2016, conferido por el Ministerio de Ciencia, Tecnología y Medio Ambiente (CITMA), y el Premio Especial de ese propio organismo al logro de mayor relevancia económica.
Incluyen, asimismo, el control y monitoreo de las filtraciones en las cortinas, y la elaboración de una norma cubana, que además de proporcionar las requeridas herramientas de enfrentamiento a las manifestaciones del cambio climático, es aplicable al diseño de nuevos reservorios de agua y para la actualización de las que se encuentran en explotación, garantizando su seguridad.
También aparecen identificadas varias alternativas de investigación o remodelación más eficaces, entre las apropiadas a nuestras condiciones, para la protección de las obras hidráulicas.
La introducción de las innovaciones ha beneficiado hasta el momento a 43 embalses de las provincias de Pinar del Río, Artemisa, Mayabeque, La Habana, Matanzas, Cienfuegos, Villa Clara, Las Tunas, Holguín, Santiago de Cuba y Guantánamo. El autor principal de este logro de la ciencia nacional es el ingeniero Eduardo Arturo Velazco Davis.